¿Qué lucha y qué fraude?

Javier Gómez Taboada FIRMA INVITADA

OPINIÓN

17 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Gobierno ha puesto el foco sobre una nueva -la enésima- ley de lucha contra el fraude. Tanto lo de la «lucha» como lo del «fraude» son ya todo un clásico…, y, por ello, ambos deben ser cuestionados. Empecemos por el «fraude», ¿qué es? Les diré lo que debería ser: aquellas conductas mediante las que ciertos contribuyentes estafan -o sea, engañan- a la AEAT y, con ella, a todos los cumplidores. El problema es que, en España, la Administración ha sembrado el mensaje de que «fraude» es toda deuda tributaria girada a un contribuyente a mayores de lo declarado. Discrepo total y absolutamente de esa idea, pues es un cajón de sastre donde se mezclan churras (genuinas estafas fiscales) con merinas (legítimas controversias sobre una normativa diarreica, espasmódica y volátil). Aderecemos el escenario con un aliño ad hoc: cada año, el Ministro de Hacienda de turno comparece públicamente para «vender» que, una vez más, la Agencia Tributaria (AEAT) ha aflorado más «fraude»… ¿Se imaginan al homónimo Ministro sueco o neozelandés celebrando tal «éxito»?

Vayamos ahora con la «lucha»: «Tolerancia cero con la elusión fiscal», dice la Ministra María Jesús Montero en su exposición de esta nueva ley. A ver, me parece muy bien en abstracto, pero en lo concreto no es oro todo lo que reluce. Hay algo -mucho- de «humo», pues no otra cosa es eso de que por ley se prohíban futuras amnistías fiscales a «grandes fortunas y patrimonios» (confieso que no sé qué diferencia a estos de aquellas): será tan sencillo como aprobar una ley que, a su vez, derogue esa prohibición, ¿No? Y hay bastante, también, de subidas impositivas encubiertas: así, consagrar el valor de referencia de mercado (por contraste con el valor real) como la nueva medida de las transmisiones inmobiliarias, supone un sensible incremento de Sucesiones, Donaciones, Transmisiones y Patrimonio; amén de echar por tierra años de sentencias favorables a los contribuyentes en esos pleitos que las comunidades autónomas pierden en más del 65 % de los casos. Sí, pues, a la «lucha», pero de frente y con el derecho en la mano. Lo que ahora se nos vende son, en gran medida, fuegos artificiales, alzas impositivas encubiertas y restricciones de derechos individuales. Y como prueba, ahí está la reciente sentencia del Supremo reprochando ciertas praxis de la AEAT en las entradas domiciliarias. ¡Libertad! #ciudadaNOsúbdito.

Javier Gómez Taboada es abogado tributarista. Socio de Maio Legal