Dígame, aquí atención primaria

Cartas al director
cartas al director CARTAS AL DIRECTOR

OPINIÓN

REMITIDA

22 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Sobre a atención primaria telefónica 

Cando os avións xa van cheos de xente e as terrazas están abarrotadas, a atención primaria no Sergas segue a realizarse case exclusivamente por teléfono. Ata cando? Nesta «nova normalidade» o excepcional convértese en normal pola vía dos feitos consumados. Pero non hai que ser sanitario, basta coa propia experiencia, para saber que as consultas telefónicas son case sempre insuficientes e ineficaces e que a observación e a exploración do paciente son fundamentais na práctica médica. Aínda máis nunha poboación de moita idade que ten dificultades para verbalizar as doenzas que padece. Iso si, se un é derivado a un especialista, ten que acudir o hospital a pedir a cita nun mostrador. Por que non se lle dá a cita por teléfono igual que foi atendido polo médico de cabeceira?

Unha vez no hospital ata onde tivo que desprazarse o home, pode ocorrer que o informen de que «a axenda está pechada» e que xa o chamarán para darlle cita. Considero que é a maneira de reducir as listas de espera. Non dar citas a partir dunha data e facer unha «lista b» de pacientes que están á espera de ser chamados.

En resumo: mala atención, trabas burocráticas, listas de espera virtuais, incerteza, desesperación... Parece que a xestión do Sergas pretende que acudamos, dunha vez por todas, á sanidade privada. Non si señor Núñez Feijoo? Diego Álvarez Vázquez.

Septiembre está demasiado cerca 

Cada cual en su castillo, y hay quien le pondría foso de cocodrilos y puente levadizo, si fuera posible. Burbuja, búnker, fuerte, torre,.. cualquier cosa que nos aísle de todo y de todos. Una Edad Media en pleno siglo XXI, más chunga que la primera porque faltan juglares y sobran bufones. Como siempre que sucede en tiempos difíciles, un sector de la población evita pensar por sí mismo y acoge con entusiasmo cualquier idea mágica que ponga solución a sus miedos, para lo cual sirve una frase o un simple eslogan con tal de que prometa un imposible o afirme un atractivo absurdo. Luego se difunde y multiplica al instante por redes sociales, con lo cual pueden aparecer cientos, miles o millones de entusiastas seguidores. Depende de la tontería. Las hay con mucho éxito. Y ya está servida la otra pandemia, contra la que solo se puede luchar con la educación de la gente. Lo que lleva un poco más de tiempo, algo así como una generación entera bien formada e instruida, por lo menos. Se debería contar también con una clase política a la altura de esa sociedad. Pero no. No es que esté a la altura, es que está en otra onda, lejos. Y septiembre, en cambio, demasiado cerca. A 10 días. M. J. VIlasuso. As Pontes.

 Héroes forzosos

Durante los momentos más duros de la pandemia el personal sanitario hizo su trabajo. Lo que los convirtió en héroes fue la falta de medios, tanto humanos como materiales, que se tradujo en un insultante número de contagios y en jornadas laborales maratonianas. Semanas después del fin del estado de alarma, no se ha reforzado la atención primaria según los compromisos adquiridos; tampoco se ha buscado una solución a las residencias de mayores ni se ha contratado al número de rastreadores necesarios. Parece que poco se ha aprendido de la tan reciente y dramática experiencia. Resulta inaplazable que todos los gobiernos, dentro del ámbito de sus competencias, dejen de fabricar a la fuerza más héroes. Para ello, bastaría con escuchar a los grandes profesionales que tiene nuestra sanidad pública y realizar las inversiones que prometieron anteayer. Julio Manuel Mancebo López. Arteixo.

C