Bienvenido, mister Sánchez

OPINIÓN

Alberto Estévez | Efe

07 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Pocas veces se habrá visto tan feliz a monsieur Torra. Si acaso, cuando volaron adoquines y ardieron coches en la Diagonal. ¡Resistid!, gritaba el condenado. Pero cómo no estar feliz si a uno en cuestión, y en cuestión quiere decir cuestionado hasta por sus socios, le visita el presidente del Gobierno y le planta delante de los labios una Agenda para el reencuentro. Políticamente, la cosa podría equivaler a un beso de tornillo. En esta imagen en la que solo faltan los cancilleres de ambas partes, Pedro Sánchez y Quim Torra ascienden unos escalones del Palau de la Generalitat, aunque el ángulo conseguido por el fotógrafo lleva a pensar si no estarán siendo tragados por ellos, descendiendo a un pozo sin fondo que es el estómago insaciable del independentismo, mientras el anfitrión presume gozoso ante Sánchez de la grandeur del edificio y lo pone en situación: «Algún día, hijo mío, nada de esto será tuyo».