Analistas

José Francisco Sánchez Sánchez
Paco Sánchez EN LA CUERD FLOJA

OPINIÓN

14 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El resultado de las elecciones británicas del jueves puede leerse de muchas maneras. Supongo que muy pronto, como ya ocurrió con el referendo, se empezará a hablar del peso de las redes sociales en la victoria conservadora. Quizá incluso de la interferencia de agentes extranjeros, rusos sobre todo. Sin embargo, según el Reuters Institute, más de la mitad de los votantes de izquierda se informan por las redes (51 %), mientras que los de la derecha apenas alcanzan el 34 %. Curiosamente, estos mismos datos servirían para explicar la caída del llamado muro rojo: zonas obreras que votaban laborista desde el siglo XIX. Si los de izquierdas se exponen más a las redes, dirán, también se exponen más a la manipulación.

Otros piensan que este resultado significa una derrota de la izquierda y de las élites europeístas que despreciaban a los que votaron el brexit. Esos estirados de los medios, de la cultura y de las universidades, los de las políticas identitarias, dicen, han sido rechazados. Lo ven como la venganza de una democracia amenazada de secuestro, un triunfo del pueblo llano. Quienes lo entienden así también creen que los resultados significan una derrota del neoliberalismo que las élites progres, cosmopolitas y tecnocráticas promueven, a menudo sin darse cuenta. Aunque parezca extraño o paradójico.

Luego están también los que analizan todo en clave de buenos y malos, de ganadores y perdedores, los simples. Justo en un momento en el que los fenómenos son más complejos que nunca, más ricos, y requieren análisis más matizados. Pocos pronosticaron, por ejemplo, la holgada mayoría de Boris Johnson. Entre esos pocos, gracias a Miguel-Anxo Murado, estuvo este periódico.

@pacosanchez