Retos para después de las elecciones

Fernando González Laxe EXPRESIDENTE DE LA XUNTA DE GALICIA

OPINIÓN

11 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los resultados de la campaña electoral sirven para despejar incógnitas. Ayer se planteaban dos de gran envergadura. La primera, la fórmula o la solución al bloqueo; y la segunda, cómo quedaba la configuración de los bloques ideológicos. En base a estos dos criterios se pueden explicar los resultados. Antes de nada, el nivel de participación no respondió a aquellos que defendían una amplia movilización; saliendo beneficiados aquellos que recogieron los últimos restos de cada circunscripción electoral. Hubo un amplio desplazamiento de votos de un bloque ideológico al otro y fuertes movilizaciones internas dentro de cada bloque. La suma PP+Vox+Cs+Suma no supera al conjunto PSOE+UP+MP. Cuando se evalúen los resultados finales, habrá que hacerlo siguiendo una lógica complementaria. Esto es, quién ganó frente a los demás; y cuánto ganó sobre sí mismo. El veredicto dice que uno ganó (PSOE); pero otros subieron respecto a las últimas contiendas electorales (Vox y PP) y otros perdieron (Cs y UP). Sobresale el gran avance de la extrema derecha.

La conclusión final nos lleva a preguntarnos si el vencedor de las elecciones (PSOE) será capaz de generar confianza, ocupar el espacio central y demostrar firmeza a la hora de formar Gobierno. Si ello fuera así, el partido vencedor pasa con nota las elecciones; y los líderes perdedores quedarán sometidos a un veredicto interno quedando cuestionada esa nueva generación de políticos. Finalmente, no podemos correr el riesgo de una nueva crisis política. Necesitamos instituciones robustas que dirijan el país y que no queden subordinadas a intereses particulares o a fuerzas políticas que no desean sostener el interés general. El coste de una nueva paralización nos llevaría a reavivar sentimientos antidemocráticos, dando lugar a la balcanización de la política.