Nativos digitales

Luis Ferrer i Balsebre MIRADAS DE TINTA

OPINIÓN

ISTOCK

13 ago 2019 . Actualizado a las 08:49 h.

Observo que en la playa, en los parques y en la calle, en general muy poca gente lee libros o lleva un libro en el bolsillo; la mayoría mira el móvil y mucho más las generaciones jóvenes, los llamados nativos digitales. ¿Vosotros cuando leéis? Yo leo mucho por Internet -contesta una generación-.

Leen por Internet mientras tiran al plato con los banners que irrumpen la concentración, buscan en YouTube, wasapean comentarios y corta-pegan ideas en los trabajos.

El nativo digital es un individuo cuyo cerebro se ha adaptado al nuevo entorno en que vivimos, está preparado para caminar sobre la cuerda floja sin caerse, su capacidad de atención y alerta a la novedad es máxima, pero ha perdido capacidad de concentración, de introspección y de silencio.

Y es en el silencio dónde surgen las preguntas, las respuestas y las ideas importantes. Los nativos digitales lo practican poco, tienen más series, amigos en Facebook y Twitter que ideas que desarrollar.

Quizá esta sea una habilidad necesaria en los tiempos futuros, pero, si despreciamos el valor de la soledad y el silencio, asumimos la sumisión al programa global de fiestas elaborado por una comisión invisible.

La mayoría de los artículos científicos son un cementerio de datos, las redacciones y reportajes periodísticos son un mar de fragmentos capturados en Internet, el propio lenguaje se está empobreciendo al comunicarse a través de wasap y 280 caracteres. Alguien decía que últimamente los párrafos, frases y palabras que se leen parecen zombis. Dejé la docencia cuando me di cuenta de que ya no manejaba este código y no podía comunicar lo que considero relevante en mi profesión. ¿Cómo se motiva a un nativo digital a leer un buen libro? ¿Cómo enseñar a leer en soledad, como las gallinas, levantando la cabeza para pensar?