La irrelevante agenda gallega

Uxio Labarta
Uxío Labarta CODEX FLORIAE

OPINIÓN

CAPOTILLO

25 jul 2019 . Actualizado a las 11:49 h.

Desde que la fiesta del patrón de las Españas es celebración propia, y de los vascos y los cántabros, la agenda gallega pareciera que lleva camino de diluirse.

El problema no se sitúa en que el candidato a presidente del Gobierno apenas nos cite lamentando un crimen machista o por la diversidad lingüística, tampoco que la portavoz de Galicia En Común Podemos haga un catálogo sectorializado de algunas realidades más o menos problemáticas. Nuestro problema es que el Parlamento y el Gobierno gallego no tienen una agenda propia.

Podemos recordar la insistente demanda de transferencia de Autopistas del Atlántico, y, más recientemente, la urgencia de la Xunta para poder disponer de los quinientos o setecientos millones ahorrados en tiempos de penurias. Quizá también la solicitud de una ‘convocatoria extraordinaria’ (sic) MIR para médicos de familia, con objeto de paliar la insensatez de un Gobierno que obliga a la jubilación a los 65 años a los médicos, y al año siguiente de la desfeita se desdice. Y en tal nebulosa anda la agenda gallega, donde pocos de nuestros problemas se diagnostican y menos se resuelven.

Y así nos encontramos con una agenda circular, en la que la pérdida de una cuarta parte de los jóvenes entre los 20 y 39 años, más de doscientos mil en diez años, se aborda con un plan para intentar ‘que vuelvan 22.000’ (sic). O el conflicto de primaria se sustancia con la acostumbrada rotación de gerentes -el que es malo aquí, nos sirve bien allí- en el área más conflictiva, un numero ingente de comisiones y reuniones y unos sorprendentes anuncios En Marcha, Plan galego de atención primaria.

Si fuera el caso de una crisis institucional, como en el Valedor do Pobo, por sentencia judicial, primero resistir sin dimitir, para, luego de una parálisis de meses, hacerlo. Y en el repique escuchar a la viceportavoz popular señalando que es una decisión que la honra, porque «todos coñecemos a existencia en Galicia doutras moitas sentenzas invalidando procesos de libre designación que non tiveron consecuencias políticas». Y a la memoria vienen sentencias invalidando concursos en jefaturas médicas donde nadie dimitió. Muy al contrario del País Vasco, donde por supuestas filtraciones de exámenes, aún bajo juicio, dimitieron el consejero y los directores del Servicio Vasco de Salud. Agenda gallega.

Por no hablar del Banco de Terras del Gobierno de Touriño, cuya ley se modificó en el 2011, para hoy andar a vueltas con la expropiación de las tierras y montes sin propietario. O anunciar, en ese plan de movilidad a demanda, que el 97 % de los gallegos tendrán una parada de autobús a menos de mil metros de su casa. Sin hablar de frecuencias ni horarios del transporte. Mientras por cada 2,7 gallegos hay un automóvil particular.

Y así, con titulares y ocurrencias, nos van construyendo la agenda gallega. Esa que, con los fulgurantes aeropuertos, sobre todo el de Oporto y el milagroso Xacobeo 21, quedará completa. Lástima de los gallegos, por ver si estamos en ella.