Una investidura a setas y a Rolex

OPINIÓN

Ballesteros | Efe

24 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Las investiduras. Esas cosas que pasan cada cuatro años, ahora casi cada cuatro meses, y siempre gana el PNV. Su portavoz contó ayer un chiste para explicar cómo hay que negociar un Gobierno. El chiste es tan perro viejo como su partido, y dice algo así: Dos vascos se van al campo a por setas. Uno se encuentra un reloj Rolex e informa del hallazgo al compañero. Este responde enfadado: pero Pachi, ¿estamos a setas o a Rolex? Los señores de la imagen van de que andan a setas, pero están a Rolex, se verá mañana. Sibilino Esteban, a Rolex y a privilegios. Rufián, a Rolex y a indultos, vean su gesto culpable, y su apellido. El hombre ensimismado a la extrema derecha de la foto no es que desprecie el Rolex, es que ansía la joyería entera. Rivera seguirá diciendo que él va a setas, lo cual tiene un riesgo vital: en la próxima excursión electoral, las urnas a lo mejor le sirven un plato de amanita phalloides.