Inepto, incompetente e inseguro

Yashmina Shawki
Yashmina Shawki CUARTO CRECIENTE

OPINIÓN

CARLOS BARRIA | REUTERS

14 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

No le conozco personalmente, pero no hace falta. Sus actos hablan por sí mismos. La improvisación, los bandazos en las decisiones, su empecinamiento en la cuestión de la inmigración ilegal, su provocación sistemática a Irán -país que obviamente no puede considerarse adalid de la democracia y el respeto por los derechos y libertades, pero que parecía estar abriéndose al mundo y había aceptado una moratoria nuclear-, su simpatía hacia el dictador norcoreano y la ambigüedad sospechosamente complaciente que muestra hacia Putin -el tirano popular de Rusia- no le acreditan, precisamente, como un presidente sólido, creíble y con un programa político interno y externo sensato. Por eso, la filtración de la calificación que ha hecho de él Kim Darroch, el embajador británico en EE.UU., quien se supone ha tenido la oportunidad de conocerle de cerca -o quizá sería mejor decir sufrirle- como «inepto, incompetente e inseguro» ha hecho que me riera durante un largo rato. Y es que Darroch no podía haberlo descrito mejor. El que Trump se haya defendido alegando que el embajador británico, pro-europeísta convencido, no ha servido bien a su país solo corrobora su falta de capacidad para debatir y rebatir cualquier argumento. El que sus declaraciones apenas pudieran oírse por haberlas hecho delante de un avión con los motores en marcha hace que sean todavía más patéticas.

Pero Trump, no es el único rubio despeinado que amenaza la política internacional. Al otro lado del Atlántico, el candidato a dirigir el Partido Conservador británico y, como consecuencia, Gran Bretaña, también es considerado «poco apto» para el puesto que aspira, pese a su carisma y popularidad. Y quien lo ha dicho no es más ni menos que su ex jefe aludiendo a sus modales de matón, su poca cultura, su débil carácter y su pasión por la notoriedad.

No es posible que no haya nadie mejor.