La magia del clonador

Beatriz Pallas ENCADENADOS

OPINIÓN

03 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Cumplir siete temporadas en antena con la buena salud y la frescura con que lo ha hecho Tu cara me suena es un hito que está al alcance de pocos programas. El concurso familiar de Antena 3, que forzó el desalojo de Sálvame de la noche de los viernes, acaba de anotar su segundo mejor estreno histórico superadas ya las cien emisiones y promete seguir creciendo sin modificar ni una coma del formato que le dio el éxito. Con un vibrante arranque al estilo de los rutilantes números musicales de Hollywood, Manel Fuentes introdujo la nueva edición del único espacio de la programación nacional que ha logrado dar un barniz más actual al concepto de espectáculo de aquel género tan antiguo denominado variedades.  

La magia del clonador no está tan solo en el hecho de transformar en grandes celebridades de la música a un puñado de famosos mediante prótesis y maquillaje. También reside en la capacidad de condensar sobre el escenario la diversión más elemental y la risa contagiosa de un casting de artistas nacido para ganar. Desde Anabel Alonso o José Corbacho, que tanto cocinan unas croquetas en MasterChef como acometen monólogos de El club de la comedia, a la versatilidad de Mimi para transformarse en la eurovisiva Eleni Foureira o la de Soraya para proclamarse vencedora con el Swish Swish de Katy Perry.