Trump enriquece el español

Francisco Ríos Álvarez
Francisco Ríos LA MIRADA EN LA LENGUA

OPINIÓN

15 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Quién se iba a imaginar que el hombre del «America first», el que quiere levantar un muro en la frontera con México y tacha a los inmigrantes mexicanos de bandidos y narcotraficantes, acabaría enriqueciendo el idioma de estos, que es también uno de los que hablamos por aquí. Y no lo ha enriquecido con una palabrita más, sino con toda una familia léxica formada a partir de su breve y sonoro apellido, Trump.

Algunos personajes históricos han dado pie a creaciones léxicas en español a partir de sus antropónimos. Algunos fueron grandes en la literatura, como Shakespeare (shakesperiano), o pensadores de la talla de Francis Bacon (baconiano); otros, músicos (de Beethoven viene beethoveniano); algunos más, políticos, como César (cesarismo)... En la lista aparecen hasta dictadores, caso de Hitler (hitleriano, hitlerismo) y personajes de ficción tan populares como Sherlock Holmes (sherlockiano).

A partir del apellido Trump se forman palabras con una estructura gráfica que no colisiona con nuestra lengua. Quizá la más usual sea trumpismo, que da nombre a la ideología basada en el pensamiento y las acciones del personaje, e incluso al sector político correspondiente. «El trumpismo radical sale derrotado en las primarias de Arizona», titula un periódico español. La versión inglesa de trumpismo, trumpism, ya ha entrado en los diccionarios. El de Cambridge lo define así: «The policies and political ideas of the US president Donald Trump [ C ] a comment made by the US president Donald Trump, or a word or expression often used by him».

Otro término que le debemos al presidente de Estados Unidos es trumpazo. Inicialmente se empleó para dar nombre a su triunfo electoral, que fue también el del trumpismo. Posteriormente pasó a aplicarse a acciones sorprendentes y erráticas de Trump, como refleja este texto del profesor Blanco Valdés en las páginas de La Voz: «... un individuo que carece del más mínimo criterio, tanto en política interior como exterior, lo que lo lleva a moverse a trumpazos».

También con diferentes significados se emplea el verbo trumpear. En México, donde más se usa, equivale a ‘mofarse de Trump’. Suena parecido a trompear, ‘dar trompadas’. Se utiliza, asimismo, con el sentido de ‘hacer cosas como las hace Trump’.

Son todas ellas voces que reflejan el universo trumpiano, que todavía nos va a dar muchas sorpresas.