Volver a hacer sector para recuperar el efecto llamada

Ramón Sarmiento SECRETARIO GENERAL DE CC.OO. GALICIA

OPINIÓN

14 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La dificultad del sector naval gallego para encontrar mano de obra es preocupante, y no se va a solucionar en el corto plazo porque el plan de puesta en marcha de cursos de formación para cualificar a los trabajadores no está funcionando.

Está fallando el enfoque del problema. La fortaleza que tenía la industria naval es que actuaba sectorialmente ante los problemas, esto es, astilleros, auxiliares y sindicatos. Alguien ha querido que no volviera a ser así, y hoy el sector está ante una situación más grave de lo que parece ser. No es tanto por la falta de cursos de formación, sino porque falta el efecto llamada de alumnos. El naval no atrae empleo porque se han deteriorado mucho las condiciones de trabajo que ofrece. Si quieres mano de obra cualificada, tienes que pagarla.

En lo mas duro de la crisis, muchos se jubilaron anticipadamente con muy buenas condiciones, porque venían de otras muy buenas de trabajo.

Hoy necesitaríamos entre 600 y 700 trabajadores que están trabajando en otros sectores y empresas de fuera de Galicia y de España en una situación que aquí no van a encontrar. El naval hoy no ofrece estabilidad, se contrata por obra, y las retribuciones se marcan por el convenio. Hay gente que desearía volver, pero en condiciones de estabilidad laboral bien retribuidas.

Pero, además, el naval necesita recuperar el efecto llamada. Hace años, la entrada en el sector pasaba de padres a hijos. La gente iba llegando a través de la familia: un padre empleaba a un hijo, un hermano a otro hermano... Eso no lo tenemos hoy. Nos faltan profesionales, y nadie que esté ahora en el sector querría emplear a un familiar.

Mientras, las plantillas de los astilleros siguen bajando biológicamente, y el número de trabajadores en nómina es cada vez más bajo, porque sus necesidades laborales las cubre la industria auxiliar en la medida en que crece o decrece la carga de trabajo.

Los astilleros tienen que dotar de estabilidad a la industria auxiliar, pero no lo hacen porque no tenemos política sectorial.

Llegados a este punto, es necesario definir cuanto antes unas reglas del juego sectorial. Necesitamos tener unos astilleros que nos ayuden a reforzar nuestra industria de bienes de equipo, y eso se consigue ofertando contratos en alianza con la industria auxiliar, dotando se estabilidad a las empresas que realmente pueden crear un empleo de calidad, y conseguir retenerlo.