Europa en la encrucijada

Gonzalo Parente VENTANA AL MUNDO

OPINIÓN

19 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo que está ocurriendo en nuestro continente arroja síntomas de que el enfermo atraviesa por un mal momento. Cuando Europa está siendo invadida pacíficamente por miles de desesperados que claman por su derecho de acogida, cuando los antiguos países del Este miran con asombro a los que ellos consideraban como los que ofrecían remedio para los males sociales, cuando algunos muestran su impotencia ante el descarado aviso de lo que podría pasar después de lo de Ucrania-Crimea, cuando los populismos ganan terreno en países como Alemania, cuando los líderes de la UE se muestran impotentes para resolver los problemas comunitarios y se llega a pensar en una Europa a dos velocidades, cuando Gran Bretaña ofrece a sus ciudadanos la posibilidad de separarse de la UE (brexit) y cuando existen unos tratados que no se cumplen, verdaderamente hay que pensar que la Unión Europea está en peligro.

Hemos vivido con alegría las distintas fases del proceso europeo, primero con el Acta Única, que facilitó el comercio sin fronteras, y después con el euro, pero no somos capaces de formar la unión política a costa de perder la soberanía que mantienen los Estados más poderosos. Y mientras Europa no tenga una sola voz, la comunidad internacional no reconocerá más que a los distintos países europeos.