El impuesto de sucesiones en Galicia

Ignacio Bermúdez de Castro
Ignacio Bermúdez de Castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

28 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Ya iba siendo hora de que el presidente Feijoo cumpliera su promesa electoral respecto a la bajada del impuesto de sucesiones y donaciones, pero al final ha sacado adelante su compromiso, y desde el 1 de enero del próximo año, Galicia, junto con Canarias, tendrán la fiscalidad más barata respecto a un impuesto por el que nuestros mayores ya han tributado varias veces por los bienes que dejan al fallecer. Atinados están aquellos que dicen que sucesiones es un tributo, o era, pensado para que en tres generaciones el importe de los bienes dejados en herencia reviertan en su totalidad a las arcas del Estado. Visto lo visto, como gallego reboso satisfacción, pero como español no acabo de entender el agravio comparativo que supone que en unas comunidades autónomas se pague X, y en otras Y, por las mismas cantidades, y en iguales situaciones personales. Algo que se evitaría releyendo nuestra Carta Magna, y más concretamente el artículo 14 de la misma, ese ingenuo precepto, hazmerreír de escépticos, que dice que todos los españoles somos iguales ante la ley sin distinción que valga. No podemos negar que el legislador de 1978, cargado de buenas intenciones, metió la pata hasta el fondo con eso de la similitud entre semejantes. Aunque quién iba a pensar que el devenir de España iba a ser el que era.