Impuestos y votos

Carlos Agulló Leal
Carlos Agulló EL CHAFLÁN

OPINIÓN

16 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo avanzó Feijoo en una entrevista a finales de agosto: «Los próximos Presupuestos nos van a permitir cumplir nuestra promesa de bajar los impuestos». Se lo va a permitir la incipiente y tímida recuperación económica, pero también otro factor sustancial: serán los Presupuestos del año electoral en el que, previsiblemente, optará a un tercer mandato. El presidente de la Xunta no es nuevo y habrá calculado, incluso, el alcance del posible efecto bumerán que tendrían medidas que sabe de antemano que serán tildadas de electoralistas.

En ese cálculo es donde está el riesgo a efectos electorales. ¿Habrá más votantes que agradezcan una rebaja fiscal cuyo alcance se concretará en los Presupuestos que presenta la próxima semana o serán más los que castiguen con su voto lo que puedan entender como un gesto oportunista? Las últimas consultas electorales pusieron de manifiesto que muchas cosas han cambiado, también las varas de medir. Son ahora mucho menos elásticas y el electorado responde con menos docilidad a las propuestas de unos políticos que venían acostumbrados a una cierta amnesia colectiva.

En los que el presidente de la Xunta calificó en aquella entrevista como los primeros Presupuestos expansivos desde el 2009 habrá, al mismo tiempo, medidas para aliviar un poco el bolsillo de los gallegos. Lo importante será comprobar si, como dijo Feijoo, los euros de más que tendrá la Xunta van a servir para paliar las penalidades de quienes han padecido y aún padecen los efectos de la crisis. Y si se emplearán para recomponer servicios públicos carcomidos por los ajustes. Será la prueba de que las medidas fiscales no tienen un afán recaudatorio de votos.