Demasiados números y pocas propuestas

César Casal González
César Casal CORAZONADAS

OPINIÓN

25 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Ya estamos como en las casetas de la feria de abril en Sevilla, solo que todavía vamos por febrero. Falta apenas un mes para las elecciones en Andalucía, pero sigue la fiesta de interpretaciones de los números de las encuestas. Ojo con las encuestas, que las carga la demoscopia y tienen tanto peligro como los finos. En esos estudios, lo más claro es que los ciudadanos están hartos de los políticos. Ni siquiera inspira confianza Pablo Iglesias, con su apostolado y sus sombras. Ellos no gustan, pero ¿y las marcas? Sigue la pelea en lo alto entre el PP y Podemos, que no es más que la pelea entre el voto útil o del miedo y el voto de castigo por los recortes. Ambas fuerzas han conseguido monopolizar ese duelo. Dicen los estudios que el PSOE ya cae a un tercer puesto, y gracias. Y es Albert Rivera el que emprende ahora el vuelo, flamante, con Ciudadanos. Al PP no le interesa esta irrupción en el espacio de centro y español desde Cataluña. El mundo al revés. Es increíble, o hasta lógico, que venga de Cataluña el partido que apuesta por la unidad de España y que se apropie descaradamente del apacible lugar en el que vivía Rosa Díez y su UPyD, que se hunde (fruto sobre todo de su cabezonería al no querer pactar con Rivera; en definitiva, al no querer repartir). El guirigay de Izquierda Unida ya es muy difícil de seguir hasta por los militantes más históricos. Y así seguimos: con un año minado de elecciones y con los votantes que parece que decidirán al final entre ese voto útil o del miedo y la papeleta del castigo para apostar por un cambio al que todavía nadie ha puesto palabras serias. Tampoco ayer, en una oportunidad tan destacada como un debate sobre el estado de la nación. Pero ¿qué más dan los debates, los programas y las propuestas si luego nadie los aplica?