Es como si de repente todo hubiese quedado viejo u obsoleto, incluidos los sueños de bienestar que, con la crisis económica, parecieran haberse esfumado. El PP bracea aferrado a unas promesas económicas difíciles de cumplir, el PSOE revisa su muestrario de ofertas para actualizar todas las que sea posible, IU se ha perdido en el camino de Podemos y las demás fuerzas políticas digieren como pueden una pulsión de cambio tan inesperada como difícil de afrontar. Ni siquiera el partido de Pablo Iglesias sabe a ciencia cierta en qué aguas navega, aunque cree tener intuiciones privilegiadas.
Esta es (o parece ser) la nueva realidad. Un maremágnum de partidos políticos que avanzan a oscuras en medio de un vendaval. La fortuna demoscópica parece sonreírle a Podemos, pero ¿quién cree ahora mismo en estas encuestas? Ni siquiera quienes las hacen se atreven a apostar por la vigencia de sus conclusiones en un futuro próximo. Por ello, parecemos condenados a avanzar a ciegas hasta que unas elecciones pongan a cada uno en su lugar y nos permitan ver, aunque solo sea coyunturalmente.
Tengo inclinación a leer las opiniones de sociólogos y encuestadores para seguirle la pista a la realidad. Pero esta vez la lectura me está produciendo una enorme confusión. Dicho en plata: cuanto más los leo, menos entiendo lo que dicen. Eso sí, hay opiniones para todos los gustos, desde quienes pronostican un triunfo de Podemos hasta quienes lo descartan por completo y anuncian un futuro Gobierno bipartito popular-socialista. En cualquier caso, una mayoría de los opinantes parece estar de acuerdo en que el triunfo de Podemos no le permitiría gobernar sin un pacto con otras fuerzas políticas.
No obstante, tampoco esto último parece estar claro porque quienes sostienen que Podemos es un partido populista de corte chavista descartan que el PSOE acceda a pactar con ellos. Pero no faltan quienes rechazan que Podemos sea populista, como hace el catedrático Carlos Berzosa, próximo a IU. De modo que en este territorio también reina el caos. Porque si Podemos no es populista ni no populista, ¿qué es? Transversal, dicen unos. Comunista, responden otros. Como se ve, no está el horno para cocer conclusiones.