La cultura en Galicia

Ignacio Bermúdez de Castro
Ignacio Bermúdez de Castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

17 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

No resulta de recibo que en un país donde el Maestro Mateo labró el Pórtico de la Gloria, exista un conselleiro de Cultura tan inoperante, el cual dedica parte importante de su tiempo a inaugurar eventos de medio pelo, cuando no a actuar de telonero del presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, en actos de más enjundia, siempre encaminados a obtener réditos electorales. Lo que tenía que hacer el conselleiro era dedicar unas cuantas mañanas a recorrer el rural, acompañado de técnicos de su departamento, y ponerse a abrir expedientes a diestro y siniestro con la finalidad de terminar con el denominado feísmo. Una vez estos problemas fueran resueltos con la mayor celeridad posible, una furgoneta y una brigada de operarios, y a tirar cuanta canasta de baloncesto se encuentre encastrada en el abside de una iglesia románica, o a restaurar el Pantocrator decapitado de cualquier otra joya del siglo XII. ¿Qué idea se lleva el turista que se adentra en la Galicia más profunda? La de un país chapucero carente de recursos y repleto de permisivos gestores que les importa un rábano la imagen que se exporte de nuestra tierra. La poltrona es lo único importante. Y es que tal vez el conselleiro de Cultura tendría que tener una formación más específica. No necesariamente más culto, pero sí más formado para su cotidiano quehacer.