Cada uno a lo suyo

Ernesto Sánchez Pombo
Ernesto S. Pombo EL REINO DE LA LLUVIA

OPINIÓN

22 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Tratando de sobrevivir, no sin grandes esfuerzos, al zafarrancho de estos días, uno tiene la sensación de asistir a una edición abreviada de la Gürtel. Aquella en la que nadie era responsable de nada, todo era un complot maquiavélico para destrozar a Rajoy y su cuadrilla y un invento de prensa, fiscales y jueces rebeldes. O cuando Juan Guerra, un adelantado de lo que hoy acontece en este reino, y el presidente se enteraba de cómo iba el país por los periódicos. Estamos en la misma línea de salida. El paso del tiempo nos ha servido de bien poco cuando de sus señorías se trata. Resulta mucho más fácil, también imprudente, hacer una declaración contra un fiscal que asumir que uno está rodeado de gente que maneja los dineros públicos en beneficio propio. Resulta más práctico mirar hacia el techo y hacerse oídos sordos que enterarse de que chapotean en una pocilga de vicios y deshonestidades. Y les compensa descalificar a quienes denuncian desde hace años la descomposición que ahora se niegan a reconocer. Bajo la disculpa de que hay que aguardar y que es lo habitual, dejan pasar los días amparando los latrocinios.

Cada uno a lo suyo, ha sentenciado mi alcalde, excompañero y amigo Carlos Negreira. Eso mismo, cada uno a lo suyo. Nosotros, a trabajar, a pagar y a callar y ellos a seguir derrochando lo que tanto nos cuesta ahorrar. Y tejiendo una tupida telaraña de excusas que nos impida ver lo que hacen.