Las elecciones europeas y los partidos gallegos

Jaime Miquel
Jaime Miquel AL DÍA

OPINIÓN

24 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Entre el 22 y el 25 de mayo del 2014 se celebrarán elecciones en los 27 Estados de la Unión para elegir los 751 diputados del Parlamento Europeo; en España se eligen 54 de estos eurodiputados en circunscripción única. La participación registrada en las últimas elecciones europeas, celebradas hace cinco años, fue del 44,9 %. Ahora esperamos una participación inferior, del entorno del 40 %. La circunscripción única obliga a todas las candidaturas a sumar un mínimo de referencia de 230.000 votos para conseguir representación. Para el PP, el PSOE, IU/ICV y UPyD, el resultado gallego no es más que la contribución de un territorio a su resultado total, situación que no tiene nada que ver con la de Anova y el BNG. El PP puede obtener por Galicia unos 430.000 votos para un total de 4,3 millones de votos en España, el PSOE 310.000 en Galicia sobre 4 millones en España, mientras que UPyD puede pasar de la marginalidad a la nada en Galicia, aunque alcanzara 1,3 millones de votos en España. IU/ICV defiende unos dudosos 1,4 millones de votos con un resultado también marginal en Galicia.

Por su parte, el BNG y Anova necesitan sumar con terceros para obtener representación, aunque no para defender su espacio político y electoral. Son dos cosas distintas. Anova puede defenderlo sin concurrir, argumentando que se elige el sistema que impone las políticas que no queremos, por lo que no participa en esta institución en tanto no se celebre un referendo sobre los acuerdos de Maastricht y Lisboa. Es un ejemplo. Pero si no concurre a las elecciones dejará sin marca al BNG, con quien disputa un número determinado de electores nacionalistas. El Bloque lo tiene resuelto porque sabe lo que es, ha sumado esfuerzos con ERC en el pasado y nada hace pensar que no vuelva a hacerlo, incluso con estos y EH-Bildu en una coalición nacionalista donde también cabe Anova. Quien tiene el problema es Beiras, porque su reencuentro con el BNG significaría dejar a su suerte a los votantes procedentes del PSdeG-PSOE o de la abstención, que es su conquista electoral, cuya nación, si es que tienen alguna, es España, nada que tenga que ver con Galiza. Alternativamente, Beiras le puede llevar los votos a Cayo Lara, pero no está escrito en ningún lado que esto vaya a proporcionar un gran resultado adicional sobre los 14.956 votos que obtuvo EU-IU en el 2009, lo que sería fracasar, porque es tirarse de cabeza a lo que está en crisis, que es el sistema en su conjunto, y esto incluye a IU, aunque pueda vivir del hundimiento electoral del PSOE. Pero además, para obtener menos votos que el BNG con toda probabilidad. Los votantes de Anova lo que esperan de Beiras es que no se mueva del sitio, nada más. Ellos saben lo que tienen que hacer, porque los lidera Jordi Évole en España y pasan por encima de cualquier cálculo de Anova en Galicia. Se van detrás del Follonero.