Percepciones sociales cruzadas: España y Alemania

Albino Prada
Albino Prada CELTAS CORTOS

OPINIÓN

22 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Este mes de junio se realizó en el conjunto de Europa el estudio de opinión Trasatlantic Trends, que en España difunde desde su página web la Fundación BBVA y que viene realizándose desde el 2002. En el trabajo de campo se plantea un cuestionario sobre muy diversos asuntos (seguridad, comercio mundial, migraciones, economía), que permite disponer de datos homogéneos en los distintos países.

Como quiera que hoy se decide el futuro del Gobierno de Alemania (y de rebote, en buena medida, de la eurozona y de la UE), parece de interés comentar las respectivas percepciones sociales, en aquel país y en el nuestro, más directamente vinculadas a la crisis económica.

Lo primero que se comprueba es que mientras en Alemania menos de la mitad de la población se considera muy o bastante afectada por esta crisis, en España el porcentaje se eleva hasta más del 80 %. Es fácil de entender que en su caso respalden y legitimen con su voto a sus dos principales fuerzas políticas, mientras que en España el descrédito social de las mismas es abrumador.

Singularmente se indaga por la gestión que Angela Merkel ha estado realizando de la crisis económica en Europa. Más de la mitad de los europeos están en contra de dicha gestión. Pero mientras en Alemania solo lo está uno de cada cuatro ciudadanos, en España llegamos a estar en contra el 85 %. Es una pena que Angela Merkel se presente solo en Alemania para gobernar de facto el conjunto de la UE (España incluida). Y no es extraño que, por eso, sus correligionarios europeos trabajen afanosamente para restar protagonismo al Parlamento Europeo.

Se entiende así que la política de eurogrilletes y austericidio que Merkel ha impuesto en el BCE y en la troika produzca efectos contrapuestos en la percepción de la moneda común. Porque mientras está reduciéndose el porcentaje de los alemanes que piensan que el euro ha sido negativo para Alemania (aún siendo del 44 %), entre nosotros el porcentaje de los que consideran que ha sido negativo para nuestra economía crece y ya alcanza a dos de cada tres ciudadanos. Pero mientras allí se discute abiertamente sobre si mantenerse o no en la moneda común, o si deben o no abandonar algunos países la eurozona, en España desconozco si entre las fuerzas parlamentarias alguna plantea estos asuntos. Y eso a pesar de que, según el estudio, uno de cada tres españoles considera que a día de hoy sería necesario no seguir en el euro y retornar a la peseta. Bastantes más aquí que en Alemania, donde piensan eso uno de cada cuatro alemanes. Aunque al menos allí cuentan con fuerzas políticas que gestionan y defienden activamente ese punto de vista.