Anna Caballé ha publicado El feminismo en España. La lenta conquista de un derecho (Cátedra), uno de los grandes libros de este año, del año anterior y, ya que en agosto está permitido hacer profecías, de los próximos sesenta años. En un país tan salvaje como España -y dicho sea sin ánimo de ofender a los salvajes, que no son tan burros como algunos conciudadanos nuestros y, por supuesto, dicho sea también sin ánimo de injuriar a los burros -, en un país, digo, tan agresivo, donde los asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas rondan las 70 víctimas anuales, un libro como El feminismo en España debería ser de lectura obligatoria en colegios y universidades. ¿Hay algún tema más importante que conocer la historia de los derechos de las mujeres, que es el termómetro del nivel de civilización de una sociedad?
El machismo, esa lacra en la que, en mayor o menor medida, incurrimos todos, hombres y mujeres, aunque, a menudo, no nos enteremos, debe ser erradicado de nuestra sociedad y solo lo lograremos con leyes pertinentes y libros de espléndida investigación como el de Anna Caballé, también autora del excelente libro Una breve historia de la misoginia. En El feminismo en España, entre docenas de historias, que se remontan al siglo XV y llegan al siglo XXI, se cuenta la apasionante relación entre las geniales Concepción Arenal y Emilia Pardo Bazán, dos extraordinarias feministas gallegas del siglo XIX.