Angelillo, ojalá hubiese más gente como tú, maravillosamente radical

Arturo González OBITUARIO

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Ángel Pazos Huete falleció a los 57 años
Ángel Pazos Huete falleció a los 57 años

Arturo González recuerda a su amigo Ángel Pazos, fallecido hace unos días

01 dic 2022 . Actualizado a las 08:30 h.

Nunca pude imaginar que estaría escribiendo estas líneas. Cuando me comunicaron que Ángel Pazos había muerto la primera sensación fue de incredulidad, de vacío, no me lo podía creer. Después se agolparon los recuerdos de los años que pasamos juntos en Santiago, estudiando Derecho, junto a otros compañeros. Y de cuando empezamos a ejercer juntos la abogacía. ¡Qué tiempos tan maravillosos y apasionantes!

Ya en su época de estudiante Ángel era un gran polemista, minucioso y meticuloso hasta el extremo en los análisis que realizaba de los supuestos, de hecho se preveía ya que lo suyo era el derecho administrativo, como se comprobó después, ya como letrado. Siempre encontraba el enfoque preciso a cualquier asunto relacionándolo con tal o cual reglamento y/o decreto que derogaba al anterior, etcétera, de tal manera que te acababa convenciendo de que tenía razón, aunque no fuera así. Cuando se lea esto, muchos pensarán que es un lugar común, que siempre se dice de los que han fallecido, pero lo cierto es que, sobre todo, Ángel era una muy buena persona. Siempre se ponía en el lugar de los demás, tenía una gran sensibilidad, era empático y lo demostraba. Trabajó sin recibir remuneración alguna para muchas causas solidarias y tal vez no tuvo el reconocimiento que merecía, pero a él le daba igual. Estoy seguro de que a Ángel le gustaría que transmitiera lo último que me dijo. Y es que estaba harto de que mucha gente culta llamase radicales a los extremistas. Y de que se utilizase la palabra radical como un insulto, como que ser radical es un peligro: ecologistas radicales, mujeres radicales, curas radicales... Radical viene de raíz, radicula, es ir a la raíz, a la esencia, a la sustancia de los temas, de los problemas. Las ramas, los que se alejan de la raíz, de la sustancia son extremistas, no radicales. Ojalá hubiese más radicales. Angelillo era así, maravillosamente radical. Que la tierra te sea leve.

Arturo González Estévez es abogado y amigo de Ángel Pazos Huete