Una mirada al recorrido vital del hombre que un día confesó a esta casa que la chispa de la vida «está en la imaginación» descubre que al amor por la ciencia se sumaba el que siempre profesó por su ciudad, la cultura y el patrimonio valencianos. Echaba en falta «un mayor conocimiento por parte de la sociedad. A los valencianos nos falta conocer nuestra propia cultura».
Compromiso con la cultura
En declaraciones como esta se escondía su condición de presidente del CVC dando fe del compromiso con su origen, que ejerció conforme a la condición del valenciano que era, pero que llevaba impreso el aroma de ser diferente, el aroma que le concedía el estilo de vida americano que trajo consigo de los años vividos en Estados Unidos.