Maria del Carmen Sánchez Pouso falleció a los 85 años
14 abr 2019 . Actualizado a las 08:16 h.Sus pies apenas llegaban a los pedales la primera vez que se sentó en el órgano de la iglesia de Santa María a Antiga do Caramiñal. Sin embargo, esto no fue impedimento para que se enamorara de la música y la convirtiera en una de sus mayores pasiones. Durante décadas, María del Carmen Sánchez Pouso, más conocida como Maricarmen A Moucha -un apodo familiar heredado de los antepasados que vivieron en la aldea sonense de O Moucho- fue la encargada de tocar este instrumento en el templo pobrense, una actividad a la que luego añadió su voz en los diferentes coros parroquiales en los que participó, muchos de los cuales fueron fundados por ella misma junto con su amigo Valentín Cerecedo.
«Tocar o piano era o único que a entretiña», confesaba ayer su hija Amparo Cerecedo, que recordaba también las intensas ganas de vivir de su madre. «Sempre dicía que era unha chica de 85 anos, porque na cabeza non había idade».
Además de la faceta musical que siempre marcó la vida de Maricarmen, también era conocida por regentar durante décadas una tienda situada a los pies de la carretera principal y a escasos metros de la casa consistorial pobrense.
Negocio familiar
La mercería había sido fundada por su abuela en el bajo de la casa familiar, un negocio que luego regentaría la madre de Maricarmen y del que ella cogería las riendas tras el fallecimiento de esta. Cuando se jubiló, continuó dedicándole mucho tiempo a su pasión por la música, y también era frecuente verla dando paseos y conversando con sus amigas, que ayer todavía no se podían creer su inesperado fallecimiento.
Sus restos mortales están siendo velados en el tanatorio Jesús de Nazareno, desde donde partirán hoy, a las 17.00 horas, hacia Santa María a Antiga, una iglesia que durante años ella llenó de música y que desde ayer está un poco más triste por su pérdida.