Estreno mundial para tres gallegos en el rali de Portugal

MOTOR GALLEGO

Álvaro Pérez, Francisco Dorado y Roberto Blach debutan en Portugal en la máxima competición con la Peugeot Rally Cup Ibérica
Álvaro Pérez, Francisco Dorado y Roberto Blach debutan en Portugal en la máxima competición con la Peugeot Rally Cup Ibérica Cedida

Álvaro Pérez, Francisco Dorado y Roberto Blach debutan en el Campeonato del Mundo con la Peugeot Rally Cup Ibérica

17 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Le llamaban Desafío Peugeot, pero el desafío será salir en la cola del pelotón. Del mejor pelotón del mundo, eso sí. Y sin experiencia previa. Pero los tres gallegos que se estrenarán en el Mundial de ralis en la cita que ya se está desarrollando en Portugal no se arredran.

Antes al contrario, Álvaro Pérez Abeijón (Moimenta, 1994; copilotado por Brais Mirón), Francisco Dorado (Lugo, 1987; con Roi Torrente a su lado) y Roberto Blach (A Coruña, 1993; con José Murado de copiloto) afrontan la cita mundialista lusa, que entra hoy en competición, con motivación extra: arrancar la Peugeot Rally Cup Ibérica a lo grande.

Álvaro Pérez debutó en el 2014 en el rali de Noia con un Saxo alquilado (que ahora es suyo), ganó el Volante FGA y el Proxecto Xoven Piloto del año pasado. Comenzó el año con la BKR2 (en el Nacional de tierra, en Lorca y Pozoblanco), pero cambió al Desafío y por eso acude a Portugal (irá a Ferrol, al Princesa de Asturias y a Cataluña, aunque pararán hasta el Botafumeiro por cuestiones de financiación). «Será muy complicado, los tramos son muy largos y técnicos y salimos detrás de todo. Los WRC lo dejarán todo sucio», analiza. «Esto es otro mundo, desde las asistencias, el ambiente y, por supuesto, los tramos. El de Ponte de Lima es complicadísimo, y la superespecial de Lousame... Nosotros vamos preguntando, y nos dicen que vamos a flipar... Pero tenemos mucha ilusión por estar aquí y vivir esto», añade.

Francisco Dorado fue campeón gallego de karting (2010), debutó en ralis en el 2015 y ganó el Volante Deputación de Lugo y el Toyota Breogán. «Por mi edad, sé que es un pasatiempo, para pasarlo bien. Merece la pena, porque el Mundial es una experiencia para toda la vida. Es una pasada. Hasta treinta y cinco coches muy similares compitiendo y, además, los mejores del mundo en competición», describe mientras atiende a sus obligaciones laborales a distancia por medio del teléfono móvil. «No me puedo permitir prepararlo como debiera. Pero disfrutaremos porque los tramos son únicos, preciosos», concluye.

Roberto Blach también fue campeón gallego de karting. Debutó en los ralis en el 2014 y desde entonces acumula experiencia en el Nacional de asfalto. El año pasado fue campeón del FIA European Rallye Trophy Junior. Este año, aparte del desafío, corre la BKR2. «Intentaremos acabar en Portugal, tenemos poca experiencia en tierra. Y cuando llegue el asfalto, queremos pelear por los puestos de cabeza. Aquí no sé lo que nos vamos a encontrar. Será cuestión de resistencia, fiabilidad, de no pinchar, y de saber dónde hay que correr, porque no en todos los sitios puedes ir al 100 %», analiza. Dice que no ha cambiado su rutina de preparación. «Al final, lo afrontas como otro cualquiera», zanja.