El resurgir del puerto de Génova

Valentina Saini

MERCADOS

-

La ciudad apuesta por la infraestructura marítima para revertir su declive y superar a los competidores del norte de Europa, como los muelles de Amberes, Róterdam o Hamburgo

14 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

A los italianos les gusta desayunar dulce: pan y mermelada en las regiones alpinas, cruasán y capuchino en Milán o Roma. Pero en Génova (noroeste) es distinto. «Aquí tenemos agua de mar en las venas», bromea Giovanni, un jubilado, mientras moja la típica focaccia genovesa en café con leche en un bar de la plaza De Ferrari, el corazón de la ciudad. «Igual por eso preferimos lo salado a lo dulce, incluso por la mañana», dice. Génova ha tenido muchas vidas. Fue uno de los principales centros financieros de Europa en el siglo XVI (tanto que, según varios historiadores, inventó el capitalismo) y sus banqueros prestaron dinero a Felipe II para sus guerras. En el siglo XIX, desempeñó un papel fundamental en el proceso de unificación italiana, y en el XX fue uno de los grandes polos industriales del país transalpino. Pero con la desindustrialización que afectó a todo el noroeste de Italia en los años 80, sufrió un grave declive, y en apenas veinte años perdió unos 200.000 habitantes.

Sin embargo, la ciudad quiere invertir la tendencia. Y mirando al mar, como uno de los grandes barcos que los astilleros navales del barrio de Sestri Ponente producen para compañías de cruceros. Cada año, turistas de todo el mundo visitan Génova y sus alrededores para disfrutar de la belleza del mar de Liguria y admirar los tiburones y peces tropicales del Acuario de Génova. Y el alcalde, un conservador pragmático, quiere abastecer de agua de mar desalinizada al norte de Italia, azotado por la sequía.

«El cambio climático hará que nos enfrentemos a crisis hídricas cada vez más graves. Gracias al mar, Génova puede convertirse en una fuente de agua tanto para Italia como para Europa», afirma Francesco Maresca, concejal del puerto y el mar del Ayuntamiento. Lo dice en una sala con frescos donde también hay un retrato de Cristóbal Colón. Pero el arma secreta de la ciudad es su puerto, que emplea directamente a más de 10.000 personas y cuenta con una ingente economía conexa. El sistema portuario formado por Génova y sus puertos limítrofes (Vado Ligure, Savona y Pra') mueve unos 70 millones de toneladas de mercancías al año. Una gran parte de las productos exportados por las empresas del norte de Italia pasa por el sistema portuario de Génova, de lejos el más importante de Italia. Pero en Génova quieren hacerlo mejor. Maresca explica: «Siempre hemos tenido un problema de infraestructuras, pero gracias a las inversiones de los Gobiernos pasados y del actual, pronto tendremos tres obras cruciales que nos permitirán incrementar considerablemente la eficiencia del puerto».

En primer lugar, el nuevo espigón, que ampliará la capacidad y hará posible dar servicio a buques de más de 20.000 TEU. Luego se está construyendo el llamado tercer paso, que permitirá llevar las mercancías del puerto directamente al ferrocarril y llegar mucho más rápido a las ciudades del norte de Italia. Y también están a punto de empezar las obras de la nueva autopista que separará el tráfico de mercancías del tráfico urbano; es decir, los camiones que transporten mercancías pasarán por carreteras distintas de las de los coches de los genoveses. «Todo esto significa que nuestro puerto podrá ser competitivo con los del norte de Europa, como Hamburgo, Róterdam, Amberes», afirma Leopoldo da Passano, experto en economía marítima de la sección de Confindustria (el equivalente de la CEOE) de Génova. Las grandes empresas del sur de Alemania y Suiza, uno de los principales socios comerciales de Italia, observan con gran interés el desarrollo del puerto de Génova: para un industrial de Zúrich es mucho más cómodo (y sostenible) exportar sus productos de alta tecnología desde Génova (a solo 400 kilómetros) que desde Hamburgo (a casi 900 kilómetros). Ya existen conexiones ferroviarias con Suiza, señala Da Passano. Pero esto es solo el principio.