La empresa que hace el trabajo invisible en las obras públicas

O.P. Arca

MERCADOS

Miguel souto

La lalinense Sumiagua distribuye tuberías y accesorios de canalizaciones desde el 2002, y ha suministrado material para aeropuertos, AVE y polígonos

16 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

«Do que vai por debaixo da terra, en plástico e fundición, témolo todo», para canalizaciones de agua, eléctricas y de servicios. Lo dice Argimiro Fernández Janeiro (Dozón, 1974), gerente de la empresa Sumiagua (Suministro Integral del Agua), que desde su sede en Lalín se centra en la distribución de materiales (también para edificación y cerramientos), sobre todo para obras públicas en Galicia. «Nos últimos 15 anos, Sumiagua estivo presente con suministros en todos os hospitais, polígonos industriais, AVE galego, Cidade da Cultura e os tres aeroportos. Ao final, o que pasa con Sumiagua é que como o produto adoita ir debaixo da terra, non é tan gratificante como outros. O tubo vai enterrado, pero cando pasas por alí sénteste satisfeito porque sabes que subministraches esa obra», explica el gerente de la firma.

Fernández Janeiro (también al frente de Gallega de Suministros Industriales, GSI) recuerda que Sumiagua nació en el año 2002, tras un análisis del mercado en el que supo ver el nicho que suponían todas las infraestructuras y obra civil por desarrollar en Galicia. No se equivocó, y comenzó con una empresa que hoy emplea a 18 trabajadores (cerca del 40 % son mujeres y la gran mayoría son indefinidos) y facturó el pasado ejercicio 2022 en torno a los seis millones de euros, desde su nave de 5.000 metros cuadrados en la zona comercial de Bergazos, al pie de la N-525 y muy próxima a la AP-53 en Lalín: «A verdade é que conseguimos unha posición recoñecida, sobre todo por servizo: agora mesmo é a gran fortaleza de Sumiagua. Temos unha estrutura propia, cunha loxística cento por cento propia, que nos permite colocar en 24/48 horas o produto en calquera punto de Galicia». Porque la comunidad autonómica constituye el 90 % del mercado para la empresa, que maneja más de 12.000 referencias y suministra tanto a constructoras nacionales de gran tamaño como a otras que son referentes gallegos y a empresas locales: «A diferenciación faina o prezo, o servizo e a atención. É a clave», resume.

De la mano de firmas españolas que trabajan fuera llegó una expansión internacional que en el 2016 marcó un salto importante, con el suministro de 40 contenedores de material para un centro de pesca en Luanda (Angola). Los materiales de Sumiagua alcanzan también a Francia, Portugal y Suiza. En este último caso, son clientes locales del país helvético los que recurren a la firma de Lalín: «A explicación é que é un mercado que se abastece de produto alemán, e o diferencial de prezos é altísimo. En certas operacións somos competitivos, e traballamos con algunhas construtoras de alí», manifiesta el empresario.

En cuanto a la incidencia de la crisis, indica que en el último año y medio las fluctuaciones de las materias primas repercutieron en escasez de materia prima y producto terminado, «e tes que estar todos os días subastando compra».

De cara al futuro, Argimiro Fernández señala que el objetivo es «consolidarnos con novas liñas de produto complementarias na obra pública. Crecer por amplitude de gama», en un sector en el que hay horizonte («queda moito por facer, como o saneamento no rural sobre todo no interior, ou o das rías») pero en el que aprecia diferencias con el paso del tiempo: «Ata o ano 2010, había moitas macroobras. Daquela coller unha obra de 300.000 euros de subministracións era algo normal. Hoxe non, hoxe colles 20 obras de 10.000, hai moita obra pequena».