Las familias tiran de ahorro para llegar a fin de mes

MERCADOS

ANDREW KELLY | REUTERS

El 90 % de los consumidores admiten que sus costumbres alimentarias han tenido que cambiar por el alza de precios

10 feb 2023 . Actualizado a las 12:19 h.

Llenar la cesta de la compra es un auténtico reto para muchas familias, que desde hace unos meses se han visto obligadas a ajustar sus presupuestos hasta el último céntimo para poder hacer frente al encarecimiento generalizado de la vida.

La inflación —que según el dato adelantado del mes de enero que esta misma semana reveló el INE se situó en el 5,8 %— está obligando a muchos consumidores a dar un giro a sus despensas y repensar algunos de los platos que acostumbraban a poner en la mesa. Y no son pocos precisamente. Porque según una encuesta realizada recientemente por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 90 % de los españoles han cambiado sus hábitos alimentarios para tratar de hacer frente a la subida de los precios de la cesta de la compra.

No en vano, un importante porcentaje de hogares patrios admite que le cuesta llegar a fin de mes. Así, el número de hogares que aseguran tener dificultades financieras ha pasado del 23 al 35 % solo en los últimos ocho meses. Además, el 60 % admiten que se ven obligados a recurrir a sus ahorros para llegar a final de mes, mientras que tres de cada diez reconocen que piden dinero a familiares o amigos para sortear las facturas y el precio de vivir, y un nada desdeñable 18 % han tenido que solicitar un préstamo al banco. Se ha encarecido la energía, los carburantes, la ropa, el ocio... Pero lo que más preocupa — de hecho, se encuentra entre las partidas que más han subido— son los alimentos, que han registrado récords históricos de precios a finales del año pasado. Según los datos de diciembre (último mes del que se tienen cifras detalladas de las partidas que conforman el IPC), los alimentos se dispararon casi un 16 % en diciembre con respecto al mismo mes del año anterior.

Con un contexto que no deja de sangrar al bolsillo de los ciudadanos de a pie, la inmensa mayoría ha modificado sus hábitos. ¿Cómo lo ha hecho? Casi siete de cada diez aseguran que a la hora de ir a la compra priorizan los productos en oferta, mientras que un 66 % dicen decantarse por las marcas blancas y un 58 % por los supermercados considerados low cost.

Un dato que preocupa mucho a los expertos es que también se está reduciendo de forma importante el consumo de productos frescos como la carne y el pescado o las frutas y verduras. Un 32 % de los ciudadanos reconocen haber disminuido la ingesta de los primeros y un 18 % el de los segundos. Al otro lado de la balanza se sitúan los considerados como productos de amplia vida útil, como los envasados o congelados, cuyo consumo ha crecido un 28 %.

Los españoles no solo tratan de ahorrar en la partida de los alimentos. También en la de la energía. Se han vuelto más cuidadosos. La mayoría afirma que apaga la luz cada vez que sale de una estancia, reduce las horas de calefacción o desenchufa el cargador del móvil cuando ya no se está usando.