Las economías familiares encaran el invierno

Isabel Novo-Corti

MERCADOS

La incorporación del euro ha repercutido notablemente en la cesta de la compra.
La incorporación del euro ha repercutido notablemente en la cesta de la compra. Óscar Vázquez< / span>

06 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Uno de los indicadores más relevantes para evaluar la vulnerabilidad de la población es la conocida como tasa Arope, por sus siglas en inglés (At Risk Of Poverty or Social Exclusion), que recoge a quienes están en alguna de estas tres situaciones: riesgo de pobreza, carencia material y social severa y baja intensidad en el empleo, es decir, en las esferas económica, de inclusión social y de acceso al mercado de trabajo. Naturalmente, la evolución de este indicador no es ajena al entorno económico. Por eso, la evolución del contexto macroeconómico es importante para la situación de las familias.

Una visión panorámica de la situación aporta el dato positivo de la moderación de la inflación en el mes de octubre con una subida del 7,3% en los precios, que viene acompañado de otros datos menos positivos y que pueden generar sobresaltos en las economías domésticas.

El Banco Central Europeo (BCE) ha vuelto a subir los tipos de interés hasta el 2 % para intentar frenar la inflación de la zona euro, a pesar de los temores de que el endurecimiento del crédito agrave el riesgo de recesión económica. Pese a ello, la autoridad monetaria todavía prevé seguir subiendo los tipos para devolver la inflación al objetivo del 2 %.

El euríbor (índice de referencia para las hipotecas), ha pasado de estar en negativo a atisbar el 3 % en la última parte del año, elevando las cuotas hipotecarias y complicando las economías familiares, al tiempo que encarece la financiación de la deuda pública, con especial incidencia en España, por el elevado nivel de la misma.

Por otra parte, el PIB español se estanca en plena campaña turística y avanza hacia la recesión técnica (encadenamiento de dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo), que se producirá al final del primer trimestre del 2023, según las previsiones.

Además, la Encuesta de Población Activa (EPA) de octubre recoge que el paro subió en 60.800 personas entre julio y septiembre, lo que supone el peor dato en un tercer trimestre desde el 2012 — sin tener en cuenta el del 2020— y que rompe la tendencia de reducción trimestral consecutiva. La tasa de paro asciende ya al 12,6 % de la población activa.

Según la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV), el riesgo de pobreza en España ha aumentado en el 2021 y, en las circunstancias descritas, debido a esta evolución de las variables macroeconómicas, es previsible que también lo haga en el 2022. El año pasado había en España 13,1 millones de personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social, es decir, el 27,8 % de la población, lo que ha supuesto un aumento de 880.121 españoles en situación de vulnerabilidad respecto al 2019. De esos 13,1 millones, un 21,7 % estaba en riesgo de pobreza, un 8,3% tenía carencia material severa y un 11, 6 % estaba en una situación de baja intensidad en el empleo. Además, un 2,3 % (1.100.00 personas aproximadamente) sufre de las tres situaciones a la vez. Por comunidades autónomas, los ingresos medios anuales más elevados se dieron en País Vasco (15.544 euros por persona), Navarra (15.269) y Madrid (14.836) , y los más bajos se registraron en Extremadura (9.500 euros por persona), Murcia (9.931) y Andalucía (9.915). En cuanto a las tasas Arope de riesgo de pobreza o exclusión social, las más elevadas se dieron en Extremadura (38,7 %), Andalucía (38,7 %) y Canarias (37,8 %). En el lado contrario, Navarra (14,7%) y País Vasco (16,0%) presentaron las tasas de riesgo de pobreza o exclusión social más bajas. Galicia, con unos ingresos medios por persona de 11.453 euros y un 25,2 % de tasa Arope, se encuentra en el undécimo y décimo lugar, respectivamente, entre las 19 comunidades autónomas (se incluyen Ceuta y Melilla).

Todos estos datos, a lo que se suma el deterioro en las previsiones, parecen apuntar a que el invierno seguirá poniendo a prueba la resistencia y resiliencia de las familias españolas.

Isabel Novo Corto. Catedrática de Análisis Económico. Universidade da Coruña