Minerales gallegos que sirven a la tecnología y a la ganadería

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Erimsa lleva más de 40 años extrayendo cuarzo y arenas silíceas de forma sostenible en Galicia, materiales que se aplican a sectores muy diversos

16 may 2021 . Actualizado a las 23:05 h.

Galicia es una gran potencia de recursos naturales y tiene una enorme riqueza mineral. Casi el 70 % de todo el cuarzo que se extrae en España procede de la comunidad, donde también son importantes las arenas silíceas. Estos minerales son imprescindibles para el desarrollo tecnológico pues son clave para fabricación de productos como la fibra óptica o las baterías recargables de iones de litio. La empresa Erimsa lleva más de 40 años extrayendo mineral siguiendo un método de cribado que garantiza la productividad y el rendimiento posterior de los terrenos: «Llevamos a cabo una minería sostenible, respetuosa con el medio ambiente y compatible con las actividades económicas que tradicionalmente han sido el motor de las zonas rurales, como son la agricultura, la ganadería o el aprovechamiento forestal», explican desde esta firma cuya sede está en A Coruña, pero que cuenta con tres plantas en Galicia (Frades, Begonte y A Estrada) y otra más en la localidad salmantina de Río Almar. Precisamente, uno de sus máximos es apostar por esta minería sostenible que ponga en valor los recursos naturales y consiga fijar población en el rural.

Esto en cuanto a la forma de trabajar, pero no en cuanto a la visión comercial. Porque Erimsa cuenta desde el año 2000 con capital noruego y, desde hace cinco años, forma parte de la compañía Elkem AS, uno de los proveedores mundiales de siliconas, productos de silicio y soluciones de carbono, combinando materias primas naturales y energías renovables; una compañía multinacional con más de 6.800 trabajadores en varios países. En Galicia generan unos 200 empleos, entre directos e indirectos pues, aparte de su equipo propio, trabajan con otras empresas que les prestan servicios auxiliares.

Gran parte de su producción se va a los países nórdicos: todo el cuarzo metalúrgico que extraen se destina a Noruega y, en menor medida, a Islandia; y lo hace a través de los puertos de A Coruña y Avilés, «lo que nos convierte en la segunda compañía con mayor volumen de exportaciones a granel del puerto coruñés», subrayan. Y las cifras hablan por sí solas: el pasado ejercicio cerraron con una comercialización de 780.000 toneladas de cuarzo y áridos, que han supuesto una facturación por encima de los 20 millones de euros.

Los materiales que sí distribuyen en el mercado nacional son los áridos y las arenas silíceas; y en esta línea es donde Erimsa está apostando por la innovación, con una gama de materiales con múltiples aplicaciones y enfocados a la fabricación de morteros y pinturas, abrasivos, fundición, pero también a camas para ganado: «Se trata de una línea que lanzamos en el 2015 y que vendemos a zonas con una actividad ganadera destacada como son Galicia, Asturias, Castilla y León y el norte de Portugal», explican. Y hablan de su fácil manejo o de las condiciones de salubridad e higiene que proporcionan como ventajas frente a otros materiales utilizados tradicionalmente, como pueden ser el serrín o la paja. «La innovación es uno de los ejes estratégicos de la minería moderna, con un valor muy importante: se aplica a sectores productivos y económicos muy diversos», subrayan. Y esta diversificación fue la que permitió que el fatídico 2020 no afectara al desarrollo de esta empresa minera, pues ampliaron la gama de arenas con el lanzamiento de Q-Sand para la industria química y de la construcción. En el año de su lanzamiento, distribuyeron 25.000 toneladas de estas arenas especiales.