El negocio millonario de la meditación

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La OMS estima que en el 2030, el sector de la salud mental moverá unos 6.00 millones. Las aplicaciones de «mindfulness» han crecido estos meses impulsadas por la pandemia

14 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El coronavirus ha traído de la mano una segunda pandemia que contagia de manera silenciosa, pero certera a una gran parte de la población. Se trata de la ansiedad o de la depresión, dos dolencias que están arrastrando a una parte importante de los españoles a un pozo del que para muchos es realmente difícil salir. Y a medida que avanza el coronavirus y las restricciones se van endureciendo, esta pandemia crece desmedida.

Y no son los únicos síntomas que están sintiendo los ciudadanos. Porque la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya alertaba hace un tiempo que con el confinamiento, la gente estaba echando mano de todas las herramientas disponibles en la red para encontrar solución al agobio, el estrés o la claustrofobia que estaban sintiendo. Para muestra, un botón. Durante el 2020 crecieron de manera considerable las búsquedas en Google sobre «cómo meditar en casa» y la palabra meditación se convirtió en tendencia en el gigante tecnológico durante una buena parte del año.

Precisamente en este caldo de cultivo, crecen de manera realmente interesante las aplicaciones de meditación. Estos programas para móviles y tablets viven su particular época dorada. Sus cifras de facturación se han multiplicado de manera considerable en los últimos meses y ya hay quien habla de un negocio millonario.

Parece, además, que esto es solo el principio. Porque el potencial de crecimiento pinta todavía mejor. La OMS estimaba en un estudio reciente que el sector el de la salud mental moverá en el 2030 unos 6.000 millones de dólares.

Con unas cifras tan jugosas, nadie quiere dejar pasar la oportunidad. A este tren precisamente se han subido las aplicaciones de meditación. Y hay dos que destacan sobre las demás: Calm y Headspace.

La primera ofrece sesiones de audio para relajarse, dormir o meditar. Y a pesar de su apariencia simple, el negocio que hay detrás de esta aplicación ha conseguido que sus creadores obtengan unas cifras de récord. En su última ronda de financiación ha conseguido levantar 88 millones de dólares. Pero sus números van un paso más allá, porque su valoración total le permite presumir de ser una startup unicornio; o lo que es lo mismo, supera los 1.000 millones de dólares.

Por sorprendente que pueda parecer, más allá de los dominios de Facebook o Amazon existen aplicaciones que son capaces de mover estas cantidades de dinero. ¿Cómo? Este tipo de negocios suelen ofrecer las sesiones de inicio -las más básicas- de manera gratuita. Esa es la fórmula para enganchar a su público. Porque Calm, por ejemplo, ofrece a partir de ahí una suscripción anual de 57,99 euros para poder acceder a todas las funcionalidades.

Su competidora directa es Headspace, una aplicación muy similar que incluso ha conseguido conquistar a Sheryl Sandberg, directora de operaciones de Facebook, que llegó a reconocer en una entrevista que era su aplicación favorita.

Detrás de esta herramienta se encuentra un antiguo monje budista, Andy Puddicombe, que decidió verter todos sus conocimientos en una aplicación de uso sencillo y accesible a cualquier persona desde su propio hogar.

Parece que su idea también ha calado. Así lo avalan los más de 31 millones de usuarios que presume tener. Y si los usuarios no son suficiente aval, también puede tirar de las cifras que atañen al dinero contante y sonante. Cuenta con 50 millones de beneficios y una valoración de 250 millones de dólares.

Headspace también está basada en sesiones de meditación guiada. Los usuarios pueden realizar esta actividad desde cualquier sitio y echando mano solo de un móvil y unos auriculares. Detrás de este sistema está lo que se llama la técnica terapéutica de la atención plena. Tal y como explica el propio creador de la aplicación, el objetivo es ayudar a las personas a que reconozcan sus sentimientos enfocándose en el presente. Los usuarios pueden acceder a una parte de este servicio de manera gratuita. Pero al igual que Calm, los interesados en disfrutar de todas las funcionalidades tienen que rascarse el bolsillo. La suscripción anual cuesta unos 94,99 euros, pero Headspace tiene una opción más: un único pago de 449,99 euros que permitirá al suscriptor disfrutar del servicio de por vida.

Netflix se une

El sistema de Puddicombe no solo ha convencido a los ciudadanos. A su proyecto se ha sumado un último agente de éxito. Netflix ha decidido atender a la salud mental creando un programa específico en su plataforma para ayudar a los espectadores a meditar.

La plataforma ha lanzado una serie de ocho capítulos que van repasando las diferentes técnicas para lograr encontrar paz interior y lidiar con el terrible estrés. Se presenta ilustrada con unas animaciones alegres de colores relajantes: «La mejor manera de experimentar la meditación es practicarla, no hablar de ella», presume el tráiler de la serie.

Aprender a relajarse a través de una pequeña pantalla de móvil

S. C.

En España, las aplicaciones de meditación también viven buenos tiempos. Pero en nuestras fronteras hay una que destaca sobre las demás. Se trata de Petit Bambou, una herramienta que ha conseguido hacerse un hueco en toda Europa con más de 2 millones de usuarios. Su programa se puede encontrar tanto en español, como en francés y en alemán.

La aplicación ofrece meditaciones guiadas, pero con una particularidad: abarcan diferentes temáticas. Así, los usuarios podrán decidir si necesitan un rato para calmar el estrés, la ansiedad y las emociones o si necesitan focalizar sus esfuerzos en olvidarse del trabajo, de la familia o de la alimentación. Además, cada programa viene acompañado de analogías en forma de dibujos que tienen como objetivo ayudar a los usuarios a recordar los principios más importantes de la meditación.

La descarga es completamente gratuita. Pero con esta versión no se puede acceder a todas las funcionalidades del programa. De hecho, tras registrarse, el usuario solo tendrá acceso a ocho sesiones de diez minutos para empezar a descubrir el mundo de la meditación. Si quiere seguir mejorando su experiencia, tendrá que suscribirse y abonar 42 euros para disfrutar durante seis meses del servicio.