Telefónica ha confiado en el que fuera su director territorial de Galicia para dirigir la expansión comercial de esta «join venture», en un momento en el que está creciendo la sensación de inseguridad en los hogares y las ventas de alarmas han aumentado. Movistar Prosegur echó a andar el 1 de marzo y la pandemia obligó a este leonés asentado en Galicia a dirigir su implantación en España desde su casa de Oleiros
13 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El pasado 1 de marzo se materializó la unión comercial de Telefónica y Prosegur, una join venture que aspira a cambiar el mercado de la seguridad privada y cuyo nacimiento se vio interrumpido por el estado de alarma que confinó a los españoles apenas 15 días después. También a Ignacio Aller (León, 1975), que se vio obligado a dirigir la expansión comercial de esta nueva compañía desde su casa en Oleiros (A Coruña). Hasta entonces director territorial de Telefónica en Galicia y norte de España, afronta este reto en un sector diferente pero con muchas similitudes al de las telecomunicaciones, en unos meses en los que la sensación de seguridad ha crecido -pese a que los ciudadanos pasan más tiempo en casa- y que ha provocado un aumento en las ventas de alarmas.
- ¿Qué se lleva de su etapa al frente de Telefónica Galicia?
- Llevo 15 años en Galicia en diferentes funciones, primero como director del negocio de móviles y después al frente del territorial de todo el norte de España; y me quedo con un equipo excepcional y con la oportunidad de haber colaborado en vertebrar unas redes de comunicación tan potentes como las que tiene Galicia, una red de fibra de casi 1.100.000 unidades inmobiliarias que es más fibra que la que tiene todo el Reino Unido. Y también me quedo con el ecosistemas de empresas TIC que tiene la comunidad, que es altísimo.
- ¿Qué supone este nuevo puesto en su carrera?
- Es un gran reto, porque supone llevar toda la responsabilidad ejecutiva de extremo a extremo: desde la comercialización del servicio, el diseño del producto, la comunicación, la definición de los procesos comerciales, hasta la venta y la posventa de dicho producto. Llego además a un sector que está en plena efervescencia, donde el concepto de la seguridad no se limita solamente a los hogares, sino que tiene posibilidades infinitas.
- Representa a dos empresas líderes, ¿que tiene de cada una esta unión comercial?
- De Prosegur tiene la imagen del buen servicio y la tranquilidad que aporta en casas y en empresas, así como su capacidad de innovación. Y Movistar representa la vanguardia tecnológica y su capacidad comercial, tenemos una red de casi 8.000 comerciales en sus canales de venta.
- ¿Ha sido difícil adaptarse a un nuevo sector?
- No, ha sido fácil, pues son sectores muy parecidos en su forma de trabajar, no he notado grandes diferencias.
- ¿Qué papel juegan las TIC en las empresas de seguridad?
- Cada vez hay una convergencia mayor entre las telecomunicaciones y la seguridad dentro de los hogares y, además, el sector de la seguridad es cada vez más intensivo en tecnología, como iremos viendo en los próximos meses: iremos ampliando los dominios más allá de la seguridad de los hogares, a las personas cuando están fuera de su casa, a la seguridad de los dispositivos que llevan los clientes y a la seguridad en las máquinas. Por ahí irán las novedades a corto plazo y tienen mucho de tecnología.
- Tuvieron un arranque interrumpido por la pandemia...
- La idea inicial era empezar a finales del 2019, pero hubo un cierto retraso por la aprobación regulatoria. Movistar Prosegur vio la luz el 1 de marzo y 13 días después el país estaba confinado así que la actividad de la compañía quedó casi paralizada, limitada a dar servicio a los clientes que ya teníamos. El reinicio fue el día 1 de junio.
- También supondría un reto personal dirigir la expansión comercial desde su propia casa...
- Todos nos hemos tenido que adaptar a esta situación en poco tiempo, también yo, y hemos tenido que aprender a conjugar una agenda llena de reuniones telemáticas, con huecos para pensar en las acciones a corto y medio plazo, y con las reuniones presenciales necesarias para cerrar los temas que en una telemática no permite. Porque la complicidad con las personas te la sigue dando la acción presencial.
- ¿Cuándo cree que podrá retomar esa vida laboral presencial?
- De momento, dada la situación, el trabajo en nuestras oficinas es voluntario y nos adaptamos a las necesidades de los empleados, aún es pronto para volver a la oficina al cien por cien.
- ¿Cuántos empleados tienen en Galicia?
- Tenemos unos 90 trabajadores, entre personal de ventas, instalación y administración.
- ¿Percibe una preocupación por la seguridad, en estos momentos en los que la gente pasa más tiempo en casa?
- Las crisis siempre llevan implícitas cierta inseguridad y este año se han acelerado las contrataciones de sistemas de seguridad a nivel nacional, a medida que han incrementado también los delitos de ocupación, especialmente en las segundas residencias. Y Galicia es la comunidad donde más han crecido estos delitos de ocupación.
- ¿Cómo es el perfil de su cliente en Galicia?
- Tenemos alrededor de 10.000 contratos de seguridad, entre hogares y empresas. Nuestro perfil de hogar tiene rentas inferiores a los 40.000 euros y con viviendas que rondan los 125 metros cuadrados. Pero es cierto que está cambiando hacia hogares más tipo piso y con superficies más pequeñas.
- ¿Y con qué gancho pretende engancharles esta compañía?
- Hemos roto el estándar del sector, donde siempre había cuota de alta y de permanencia y donde las operadoras negocian casi individualmente el contrato con cada cliente. Nosotros tenemos una oferta pública muy sencilla, sin permanencia de ningún tipo, pese a la cuantiosa inversión que tenemos que hacer. Apostamos porque el cliente se quede con nosotros.