De taller de avionetas a escuela de paracaidismo

MERCADOS

ALBERTO LÓPEZ

La empresa de Castro de Rei, pionera formando pilotos de drones, es el centro de referencia en el mantenimiento de aeronaves del noroeste peninsular

19 jul 2020 . Actualizado a las 13:43 h.

La aeronáutica es un sector en auge y el aeródromo de Rozas, en Castro de Rei, se ha convertido en un referente nacional en la materia. Desde allí opera desde hace tres décadas la empresa Actividades Aeronáuticas Lucenses, SL (Aerolugo). La firma, que comenzó como un taller de avionetas, se ha convertido en el centro de referencia para el mantenimiento de aeronaves del noroeste peninsular y ha sido pionera en la formación de pilotos de drones. La empresa continúa ampliando líneas de negocio, aprovechando el tirón de la aeronáutica y la proyección de Rozas. Por ello, están montando una escuela de paracaidismo y otra de ultraligeros.

El gerente de Aerolugo, el ingeniero industrial, piloto y formador Luis Abelleira Álvarez, explica que la empresa nació en los años ochenta. Comenzó a trabajar como taller de mantenimiento de aviación general, con clientes solo de Lugo, pero el negocio fue creciendo. En el 2003 hubo un gran cambio en la regulación europea de aviación, con la homologación de los procedimientos que se realizan en cada país. Aerolugo apostó por el sector y se ha convertido en la única empresa del noroeste peninsular habilitada para el mantenimiento de aviones de terceros monomotor y bimotor: «Podemos reparar aeronaves de hasta 5.400 kilos, lo que supone unas 16 plazas, pero la mayoría de los aviones que llegan a nuestras instalaciones tienen entre dos y seis plazas», explica. La empresa siguió creciendo y amplió las líneas de negocio con la formación de pilotos, consultorías, auditorías y asesorías a otras escuelas de pilotos, la más lejana, en Tenerife. De este modo, han realizado los manuales de formación para unas cuarenta escuelas de pilotos de España, la mitad de las escuelas del país. En el 2014 dieron el salto al mercado de los drones, con la formación de pilotos -siendo pioneros en la puesta en marcha de cursos on-line- y la asesoría de empresas formadoras.

 El auge del sector les ha llevado a emprender nuevamente y ponerse a la vanguardia con la creación de una escuela de paracaidismo, que está a punto de ponerse en marcha, y que se convertirá en la primera de Galicia: «Las más cercanas están en Portugal y en el sur de León», explica Abelleira. Se trata de una disciplina muy demandada, por lo que prevén desarrollar formación todos los fines de semana. En la actualidad, trabajan en Aerolugo ocho personas, entre mecánicos, ingenieros y formadores.

ALBERTO LÓPEZ

Luis Abelleira, gerente: «Hay una gran demanda de profesionales de la aeronáutica»

Luis Abelleira Álvarez, vinculado a Rozas desde su infancia, es el gerente de Aerolugo, una de las entidades impulsoras de la puesta en marcha del ciclo superior de Aeronáutica en el CIFP As Mercedes, de Lugo, cuyos alumnos realizan prácticas precisamente en las instalaciones que Aerolugo tiene en el aeródromo de Rozas.

-¿Por qué se montó este ciclo?

-Básicamente, porque no había técnicos en Galicia. El sector estaba en auge y no había dónde formarse. Yo mismo me tuve que formar en Mecánica en Madrid. Así que se firmó un acuerdo entre Aerolugo, INTA, el Ministerio de Educación y la Consellería de Educación para poner en marcha esta formación en As Mercedes.

-¿Qué aceptación tiene?

-Es un éxito, vamos ya por la cuarta promoción, en septiembre comenzará la quinta y la inserción laboral es muy alta, los contratan a todos. Hay una gran demanda de profesionales aeronáuticos.

-¿Es un sector en el que se precisa reciclarse constantemente?

-Sí, sobre todo los mecánicos, que tienen que recibir formación cada año.

-¿Cuántos aviones pasan al año por el taller de Aerolugo?

-Tenemos medio centenar de clientes habituales, que vienen a Lugo a hacer las labores de mantenimiento, revisiones y reparaciones. Algunos tienen solo un avión, pero otros disponen de tres o cuatro. La afición por el vuelo está creciendo. Hay gente que tiene su avión privado, pero otros lo alquilan en el Aeroclub o crean pequeños clubes.

Desde Lugo han formado a medio millar de pilotos privados

 La formación de pilotos es una de las ramas que más demanda está teniendo en el sector aeronáutico. Según explica Abelleira, los estudios apuntan a un gran crecimiento de los vuelos comerciales. «Se preveía que entre el 2018 y el 2026 se duplicaría el número de vuelos comerciales, por lo que es un sector en auge a lo bestia», con una gran demanda de pilotos, azafatas, mecánicos... La escuela de pilotos se gestiona actualmente mediante convenios con el Real Aeroclub, situado también en Rozas. De sus aulas han salido formados como PPL (pilotos privados de avión) medio millar de personas en los últimos años. Esta licencia permite volar aviones sin hacer operaciones comerciales, para aquellos interesados en volar por placer o por hacer turismo. Pero también son muchos los que comienzan en Lugo como pilotos privados, un primer paso para luego seguir su formación en otras escuelas como pilotos comerciales.

También la formación de pilotos de drones se realiza mediante acuerdos con el Aeroclub, para lo que Aerolugo realiza las auditorías. En los últimos años, han salido de sus aulas más de mil licencias para manejar vehículos aéros no tripulados. La demanda de esta formación se debe, en gran medida, a las múltiples utilidades que ofrece un dron: el campo de las ingenierías, audiovisual, operaciones de mantenimiento, investigación, extinción de incendios o rescates y salvamento, entre otras.