«Nunca he tenido ningún problema por ser mujer, sé que soy muy afortunada»

La Voz

MERCADOS

17 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La coruñesa Catarina Horro Pita se siente «muy a gusto» en Barcelona, después de 17 años en el Reino Unido. El Brexit influyó en su decisión de dejar el país y la oferta de Anapharm Bioanalytics resultó determinante. «Viendo que tus amigos se van y teniendo una oportunidad fantástica, ni me lo pensé», reconoce, un año después.

-¿Ha influido el Brexit en su decisión de volver a España?

-Sí y no. Sabía que no me iba a afectar porque mi marido es inglés, pero sí noté que casi todos nuestros amigos españoles, varias parejas con niños más o menos de la misma edad, se fueron marchando, y uno de los motivos era el Brexit. Al ver que tus amigos, que al estar fuera son tu familia, se van, y al surgirme esta oportunidad fantástica de venir a Barcelona, ni me lo pensé.

-¿Ha tenido más dificultades en su carrera por ser mujer?

-Para nada. Creo que el sector farmacéutico es el que menor diferencia salarial tiene. Nunca he tenido ningún problema por ser mujer, sé que soy muy afortunada. En Inglaterra, incluso me ascendieron estando embarazada. Aquí, no sé cuál es el sueldo de mis compañeros, pero no me imagino que el mío sea menor por ser mujer. El sector farmacéutico tiene muchas mujeres, la fundadora de la empresa en la que trabajo es una mujer y cuando llegué, el 80 % eran mujeres.

-¿Tiene en cuenta la conciliación a la hora de coordinar el trabajo del equipo que dirige?

-Una de las cosas que me atrajo de venir aquí es el horario laboral, que es de 7.00 a 15.00 para la mayoría de los trabajadores. Puedo recoger a mis hijas del colegio todos los días. Y a la gente que puede realizar su tarea desde casa se le permite el teletrabajo cuando el niño se pone enfermo. Estamos por el buen camino de la conciliación, sé que no es lo habitual y que tengo suerte.

-¿Cómo ve la situación de la ciencia en España?

-La ciencia en España está sufriendo. En investigación cada vez hay menos becas y más precariedad, y un país sin investigación no llega a ningún lado. Yo no lo estoy viviendo porque no trabajo en ese campo, pero para ir a un congreso científico tengo que irme fuera y aquí no hay universidades que estén haciendo nuevos descubrimientos de los que puedas conseguir información. Es una pena.