La firma compostelana Situm dispone de tres gamas de producto: módulos de guiado por interior de edificios, monitorización de empleados y optimización de trayectorias. Además, su tecnología posibilita el tener localizados y controlados en todo momento a los pacientes de un hospital
04 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.En los dos últimos años, la evolución de Situm, con apenas cinco años de vida, se podría calificar como de «espectacular», término que emplea su vicepresidente, Gregory Botanes. «No es que lo diga yo, es que lo dicen tanto los resultados de la evolución en ventas, la expansión internacional y el incremento de clientes, sectores y países en los que estamos presentes».
Su apuesta se centró en proporcionar geolocalización de alta precisión, incluso, en entornos cerrados o en el interior de estructuras donde el GPS era del todo inoperativo. «Había cosas similares, parecidas, pero no iguales. No respondían a la solución que buscamos», apunta.
De este modo, echaron mano de un algoritmo propio de inteligencia artificial y optaron por la fusión múltiple de distintas señales. De este modo, para establecer el posicionamiento de una persona o un objeto en un edificio, la propuesta de Situm combinó la información de las señales preexistentes, ya sea el campo magnético, las señales wifi o las de bluetooth, con la derivada de la que proporcionan los sensores inerciales o de movimiento del smartphone, caso del giroscopio, el acelerómetro o la brújula.
«Al hacer cosas que ningún otro puede hacer, nos diferencia de forma competitiva y nos ha permitido abrir una serie de nuevas aplicaciones, tanto para guiado de personas como para la monitorización de individuos u objetos dentro de edificios», incide Botanes, al tiempo que destaca que entre el 2017 y el 2018 «cuadriplicamos la cifra de ventas». Esto se traduce en que «tengamos clientes en cuatro continentes y estemos a punto de cerrar el quinto» (Oceanía) y que se pueda encontrar su tecnología en un amplio abanico de sectores, caso del transporte de viajeros -aeropuertos, estaciones de ferrocarril y cruceros-, la sanidad -hospitales públicos y privados de España y de otros países, como Turquía, mientras se posicionan para entrar en América y Asia-, centros comerciales y de congresos, museos, empresas de servicios...
El número de usuarios finales que pueden usar la tecnología de esta firma compostelana es, hoy por hoy, imposible de calcular, aunque fácilmente se podría hablar de decenas de miles. Y es que sus productos se pueden encontrar en miles de inmuebles y empresas de más de cuarenta países.
A raíz de la tecnología base de posicionamiento, la firma ha sacado tres gamas de producto. Por un lado, Situm Wayfinding, un módulo de guiado para interiores que sería el que se utilizaría con los pasajeros de un aeropuerto o los huéspedes de un hotel, por poner dos ejemplos. Este control, seguimiento y monitorización de personas puede, asimismo, emplearse en edificios con unas características muy concretas, ya sea por razones de seguridad o de sanidad. Es el caso de un centro sanitario en el que, mediante pulseras de posición, se podría determinar en todo momento dónde se encuentran los pacientes. En la actualidad, está presente en siete centros dependientes del Sergas, así como en cinco del grupo Quirónsalud y otros siete en Turquía.
Por otro lado, Situm MRM es una central de monitorización de trabajadores, como pueden ser los vigilantes de un centro comercial o personal de mantenimiento de un hotel. «Podemos asignarles tareas, analizar sus recorridos, sus trayectorias y saber lo que han hecho», indicó Botanes.
El tercero de estos productos específicos se centra en la monitorización y optimización de trayectorias. Por ejemplo, las que seguirán los toros mecánicos o carretillas elevadoras dentro de una fábrica. Entre sus clientes ya se encuentran empresas líderes de automoción que se ahorran costes al poder optimizar las trayectorias, pero también el número de carretillas que tienen que operar en un momento determinado.