Pero estas andanzas no son aptas para cualquiera. «Para ver estos lugares o disfrutar de cosas especiales hay que asumir que nos salimos de las vacaciones más estándar. Hay que ir con la mente muy abierta y saber que en muchas ocasiones ni vamos a viajar en coches cómodos ni vamos a dormir en estupendos resort con todas las comodidades».
Lo que sí tiene claro esta experta es que, cada vez más, los españoles buscamos no solo ver, sino también empaparnos de culturas extrañas: «Cada vez queremos más tener contacto con comunidades locales y que hacen cosas completamente diferentes a lo que hacemos nosotros, ver animales en su propio entorno y disfrutar mucho de la experiencia, no limitarse simplemente a visitar y ver un lugar».