La Universidade da Coruña apuesta por la internacionalización, con intercambios en Estados Unidos y Gales. La enseñanza durante el grado en Dereito se centra en casos prácticos
30 dic 2018 . Actualizado a las 05:13 h.Muy deseada. En Galicia hay unas 550 plazas, y aún así las notas de corte exigen un mínimo (en la UdC, la última fue 7,93 sobre 14), porque se trata de estudios muy demandados y con múltiples salidas laborales.
El grado de Dereito es un valor seguro y año tras año cubre todas sus plazas en Galicia, y son casi 550, sumando también los simultáneos con otras especialidades. El éxito de esta titulación radica en su significado, porque es considerada un pilar de la sociedad: «Calquera persoa establece relacións xurídicas cada día», recalca José Antonio Seoane, decano de la facultad coruñesa, que menciona como ejemplo que «cando subimos a un autobús, facemos un contrato».
Y es precisamente este aspecto práctico, que se extiende a cualquier ámbito de la vida, lo que se destaca en el campus de A Coruña. «As normas cambian ao longo dunha vida -reflexiona Seoane- e a memoria é algo relevante, pero non a aprendizaxe memorística»; por eso a los profesores coruñeses les preocupan tanto «as habilidades argumentativas, as competencias de saber facer, que supón manexar a linguaxe». La organización más habitual del aula consiste en «unha parte expositiva co grupo completo e despois sesións de grupos reducidos -de veinte alumnos- para avanzar na análise, persuasión, preparación dun caso... Sublíñase a importancia desas competencias». No es de extrañar que esta filosofía se extienda a los másteres, y por eso ofrecen tanto el de abogacía, obligatorio para ejercer como letrado, como el de asesoramiento de empresas (con especialidades en inmobiliaria, urbanismo y medio ambiente).
Pero si en otro punto destaca la facultad de A Coruña es en la internacionalización. Los alumnos pueden acceder a un doble grado con la South Wales University y a un máster doble con la Widener University Law, en Delaware (Estados Unidos). «Estas titulacións -explica José Antonio Seoane- abren o abano de opcións formativas para o traballo fóra», además de mejorar la competencia comunicativa de los alumnos. Aclara además que aunque vivir en otro país siempre supone un gasto, «ninguén deixa de estudar o que desexa por falta de cartos», ya que hay numerosos programas que sirven para compensar la renta familiar. Quien prefiera optar por quedarse en casa, también tiene la posibilidad de estudiar asignaturas en inglés, y solo necesita un B1 que deberá convertirse en B2 (First) al final del primer año de carrera.
¿Por qué estudiar Derecho? Seoane reconoce que le parece interesante «a forma de pensar dos xuristas, a maneira de argumentar» y cree que la carrera está pensada para alumnos «traballadores que sexan capaces de pensar por si mesmos e analizar a realidade». Rompe mitos al decir que «non é difícil e quen quere pódea sacar», aunque obviamente exige cierto esfuerzo. En cuanto a su utilidad, Seoane es rotundo: «Fixa os piares que necesita unha carreira profesional». La abogacía es una salida, pero también la asesoría y consultoría empresarial, las oposiciones propias y las generalistas, además de la investigación.
