Las loterías que dan el pase para ser el nuevo rico de la lista Forbes

Laura García del Valle
Laura G. del Valle REDACCIÓN / LA VOZ

MERCADOS

maria pedreda

El MegaMillions de EE.UU. acaba de entregar el mayor premio del mundo a un único acertante: 1.350 millones de dólares; el Euromillón está lejos de cifras tan golosas como las americanas

05 nov 2018 . Actualizado a las 10:32 h.

Salir a cenar pizza es un plan de domingo perfecto para muchos ciudadanos. El simple hecho de tener tiempo para el esparcimiento es ya de por sí un lujo que la clase media valora por encima de muchos bienes materiales. Que se lo digan sino a Gillian Bayford, un británico que en el 2016, justo después de enterarse de que había sido premiado con 167 millones de euros del bote del Euromillón, salió a celebrarlo con su mujer y sus dos hijos a un modesto restaurante italiano. Allí comenzaron a cimentar la que sería su nueva vida, en la que no faltaría el lujo y el alarde. Pero tampoco las desdichas. Dicen que no está hecha la miel para la boca del asno, y el humilde Gillian no supo gestionar su nuevo estatus. Los carísimos coches deportivos que les compró a sus hijos, que no sabían conducir, quedaban huérfanos en el garaje. Su nueva mansión, que había que decorar acorde al nivel económico del que disfrutaba, le generaba verdaderas jaquecas. Y fue su matrimonio el que pagó el peaje de estos bruscos cambios con una dolorosa separación. El dinero no ganó la partida. De hecho, esta misma semana Gillian anunciaba que volvía a abrir su tienda de discos de barrio para olvidarse de la tortura que le había supuesto ganar el Euromillón. Que no se enteren al otro lado del Atlántico, en Estados Unidos, donde al tiempo que Gillian retrocedía a su antigua vida, un ciudadano de Carolina del Sur ganaba el mayor premio del mundo entregado a un solo individuo gracias a MegaMillions: 1350 millones de dólares (1.190 millones de euros). ¿Qué suerte correrá este nuevo rico?

En primer lugar, el afortunado tendrá que dejar de vivir en el anonimato, pues en Estados Unidos se firman los boletos por detrás para comprobar su autenticidad y la ley obliga a revelar la identidad del ganador. Tan incómoda es para algunos esta situación que, en febrero, una vecina de New Hampshire llevó a los tribunales a las autoridades porque quería renunciar a los 500 millones de dólares del premio de la Powerball porque detestaba la idea de que su nombre y apellidos saliesen en los medios de comunicación.

Precisamente es Powerball la compañía que en total ha repartido más dinero en un solo premio: 1.586 millones de dólares (1.392 millones de euros). Aunque el bote tuvo que repartirse entre tres apostantes. Pero se llevaron un buen pellizco, concretamente de 464 millones de euros cada uno.

El pellizco se mira aún con ojos más golosos si se compara con el sorteo más famoso de España, y en el que el resto del mundo, atónito, pone los ojos el 22 de diciembre: la Lotería de Navidad. Con un premio máximo de 400.000 euros, parece mentira que arrastre los datos que le acompañan. Atendiendo solo a la esquina noroeste peninsular, los gallegos gastan de media en este sorteo 63,51 euros. Una cifra elevada si se compara con los 39,96 euros de Baleares y muy moderada si se pone el foco en los 99,88 euros de Castilla y León. La ceremonia alrededor de la Lotería de Navidad responde más a una tradición que a una obsesión por acumular billetes.

Si este fuera el caso, lo mejor es virar hacia el Euromillón, el juego que hace soñar a Francia, el Reino Unido, Portugal, Irlanda, Bélgica, Luxemburgo, Suiza, Austria y España. Es este último país, de hecho, el que tiene el honor de haber recibido el mayor premio de Euromillones. Fue en Las Palmas hace ahora un año, cuando un único acertante se llevó la friolera de 190 millones de euros. Sobran excentricidades en las que uno puede derrochar este dinero. Para abrir boca: se puede vivir un año entero en el hotel más caro del mundo, un crucero submarino que surca el Caribe; o se abre la posibilidad de comprar una isla. Es más, por 24 millones de euros hay varios islotes en Baleares disponibles para los más pudientes.

Aunque hay casos como el de Gillian Bayford que aseguran que viven mejor con un modesto sueldo que siendo multimillonario, lo cierto es que al grueso de los mortales no le incomodaría demasiado pasar a formar parte de la lista Forbes. Al menos antes de verse abrumados por la riqueza. Es lo que demuestra el aumento de un 9.000 % en la cantidad de visitantes de la web de PowerBall desde que entregase los 1.586 millones de dólares. Lo mismo ha pasado esta semana con MegaMillions, que ha tenido un 400 % más de entradas en su web.

italia. La jornada grande de la «Lotería Italia» es el día de Reyes. El boleto cuesta 5 euros y con el primer premio se ganan 5 millones de euros. Se puede seguir por televisión y su audiencia es envidiable.

china. Amantes del juego y la lotería, por menos de un euro pueden ganar premios de hasta 680.000 euros. Es el segundo país del mundo que más dinero gasta en estos sorteos. No tienen Lotería de Navidad.

RUSIA. No existen loterías de Navidad. Pero hay tres sorteos que hacen las delicias de los rusos: «Gslotto», que entrega más de 1 millón de euros, «Rúskoye Loto» y «Sportloto». Son como las quinielas españolas.

NUEVA YORK. Los ingresos que genera esta lotería son destinados a financiar la educación del estado de Nueva York. Se juega los miércoles y los sábados. Consiste en elegir 6 números que van del 1 al 59.

PAÍSES NÓRDICOS. El «Onsdags Lotto» se juega en Dinamarca, Estonia, Finlandia, Islandia, Letonia, Lituania, Noruega y Suecia. Hay que acertar seis números entre el 1 y el 48 y ha dado premios de un millón de euros.

ilustración: maría pedreda