«Gestionar dinero público y salud es una gran responsabilidad»

Susana Luaña Louzao
Susana Luaña REDACCIÓN / LA VOZ

MERCADOS

PACO RODRÍGUEZ

Estudió Medicina y ejerció en atención primaria, pero lo dejó para dedicarse a la gestión sanitaria, en la que pasó por diferentes niveles hasta hacerse cargo, hace año y medio, de la gerencia del área integrada compostelana. Eloína Núñez supera las dificultades de un cargo de alta responsabilidad con una gran capacidad de trabajo, por eso sabe cuándo empieza su jornada, pero no cuándo acaba

04 nov 2018 . Actualizado a las 22:52 h.

Eloína Núñez (Ourense, 1961) tiene un currículo difícil de resumir. Médico de profesión, lleva más de quince años en puestos de gestión. Fue gerente de atención primaria en Ourense desde el 2002, y a partir del 2009, gerente del complejo hospitalario de Ourense, hasta que el 23 de febrero del 2017 se puso al frente de la gerencia integrada del área sanitaria de Santiago.

-Y pese a su currículo, quedará la sospecha de que está aquí por ser prima del presidente de la Xunta. ¿Cree que no se lo dirían tantas veces si fuese hombre?

-Seguro, lo tengo clarísimo.

-¿Se lo siguen diciendo?

-Cada vez menos, pero con mi bagaje... Si soy médico es porque hice la carrera, y como médico de familia empecé a trabajar en una consulta y en un momento determinado, cuando se reestructuró la atención primaria y se montó el 061 y los PAC, me llamaron y empecé como subdirectora de atención primaria. De ahí pasé a la dirección médica, a la dirección asistencial, dirección de gerencia... Creo que soy de las pocas profesionales de la gestión que han empezado desde abajo y han pasado por todos los puestos.

-¿Es más fácil la gestión en Ourense o en Santiago?

-Cada área tiene un entorno diferente, pero el de Santiago es un hospital mucho más complejo y hay que dedicarle más tiempo. Es cuestión de adaptarse.

-Usted sigue viviendo en Ourense, ¿cómo lo lleva?

-Antes me levantaba a las siete y ahora me levanto a las seis. Y a las ocho y media de la tarde cojo el tren de vuelta.

-Son muchas horas.

-Son las horas que le he dedicado siempre. Gestionar dinero público y salud es una responsabilidad, y más en el ámbito en el que a mí me toca. Esa responsabilidad es doble porque gestionas un presupuesto y estás tratando con la salud de la gente.

-¿No resulta complicado gestionar áreas sanitarias tan amplias?

-Lo que no puede ser es lo que nos pasaba antes; un gerente en atención primaria, un gerente en cada hospital, un director general... El paciente es uno y lo que hay que hacer es establecer los protocolos en función del paciente. Ya no hablaría de coordinación, hablaría de integración.

-Los pacientes se quejan de que hay áreas que funcionan mejor que otras. ¿Es así?

- Hace 25 años no había ni PAC, los médicos atendían muchas veces en sus casas... Hoy tenemos en todos los ayuntamientos centros de salud y están integrados en las comarcas. De lo que se trata es de que, sea donde sea, el paciente tenga los servicios que necesita y lo más cerca posible derivándolos al hospital de referencia. Yo creo que hoy las siete áreas integradas, si bien no son iguales, son más homogéneas.

-¿Debería haber más coordinación con los servicios sociales?

-Para eso está la coordinación sociosanitaria; ahí sí que podemos hablar de coordinación. En la Consellería de Sanidade tenemos una red de trabajo social muy amplia y Política Social también tiene la suya; a lo mejor teníamos que estar también integrados. Es una posibilidad.

-¿Cree que el sistema corre el riesgo de colapsar?

-Eso una exageración. Un colapso es algo que no funciona y la sanidad funciona 24 horas los 365 días del año.

-Maneja casi 590 millones al año. ¿Es suficiente?

-El presupuesto en sanidad es imparable, tiene que haber siempre más porque las necesidades son más, pero también hay que ser responsables porque es dinero público y tenemos que hacer un uso adecuado de los recursos.

Eloína Núñez gestiona al año casi 590 millones y coordina una plantilla de 6.500 profesionales. | paco rodríguez

las aficiones que echa de menos

el detalle

Va y viene todos los días de Ourense a Santiago en tren y es, por eso, una gran defensora del servicio ferroviario. Tiene dos hijos mayores y reconoce que criarlos fue más fácil gracias a la ayuda de su marido, que también es médico. «Aunque hay cuestiones que las tiene que resolver la madre, supongo que es más fácil cuando quien falta de casa es el padre». Los chicos ya son mayores, y aunque ninguno hizo Medicina, los dos trabajan en sectores relacionados con la profesión, ya que él es radiofísico y ella, bioquímica. La madre y la tía de Eloína fueron enfermeras, y ella está convencida de que eso influyó en su vocación, como ella y su marido influyeron en las de sus hijos. Tiene, por lo demás, varias aficiones que tuvo que dejar por falta de tiempo: «Me gusta leer, pero ahora no puedo. A veces me llevo lecturas para casa, pero de trabajo. También me gusta el cine, y deporte hago poco, pero me obligo a retomarlo». De joven coleccionaba sellos y monedas, «pero también tuve que dejarlo».

Me gusta la ciudad de Nueva York, a la que viajo en familia cuando puedo porque mi hijo está trabajando allí en un hospital»

«Siempre digo que al sistema universal de salud se aporta por adelantado, con los impuestos»

El presupuesto que gestiona este año asciende a los 589,4 millones de euros en un área sanitaria de la que forman parte 6.500 profesionales que realizan 18.000 consultas diarias, atienden cada día 1.300 urgencias, reciben 116 ingresos hospitalarios y operan a 96 personas en cada jornada. Es, ademas, el único hospital gallego universitario, por lo que al personal ordinario se suman 1.200 investigadores. Se puede decir, por lo tanto, que Eloína Núñez sí es una mujer con poder.

-Hay servicios con problemas enquistados, como urgencias ahora, en época de gripe, o en vacaciones por falta de personal. ¿No es mejorable?

-Todo es mejorable. Los servicios de urgencias son transversales, confluyen todas las especialidades y todas las patologías y no es un servicio que puedas programar. Quizás debería tener una dimensión nacional teniendo en cuenta que es una casuística general. Cuando llega la gripe estamos con urgencias en cualquier comunidad autónoma. En Santiago tenemos un espacio muy justo, eso es verdad.

-Otros problemas: listas de espera y derivación a las concertadas. Les acusan de favorecer la medicina privada.

-Es totalmente falso. A la concertada se deriva lo que hay que derivar, ni más ni menos. En cuanto a las listas de espera, creo que a veces se manipulan los datos. Las patologías menores, unas varices, unos juanetes... pues tienen una espera, no pueden estar en la misma lista que un enfermo de cáncer. Para eso se han hecho las prioridades y la vía rápida. Para el cáncer es un máximo de 30 días y nosotros estamos en los 11 días. Creo que ahí hemos avanzado mucho.

-¿Somos un ejemplo para otros países?

-Vienen a verlo y quedan asombrados, porque el sistema sanitario español es universal y les llama la atención que los pacientes no aporten una parte. Yo siempre digo que al sistema universal de salud se aporta por adelantado, con impuestos.

-¿Duerme bien?

-Sí, ojalá siga durmiendo bien. Cuando hay un problema no se duerme igual, eso es cierto...

-Pero aquí hay problemas todos los días...

-Pero hay que darle importancia a lo que la tiene y en su justa medida. Si me impidiese dormir no debería estar aquí.