Fantasía fue la primera firma que puso en marcha Laboratorio del Ocio, a la que años después siguieron Fan Square y Megajump, dos conceptos totalmente innovadores en el sector; hoy dan empleo a 80 personas
18 mar 2018 . Actualizado a las 05:10 h.Cuando Sandra Armas y Ana Chas comenzaron hace 21 años a trabajar en el campo de la animación, no podían pensar que dos décadas después el ocio en Galicia tendría su propio sello. Fantasía fue la primera firma de estas dos coruñesas, a las que se sumaron años después Megajump y Fan Square. Esta última revolucionó el mundo de los cumples en un espacio diáfano de 3.000 metros cuadrados basado en el juego inteligente, con diferentes zonas (incluido un restaurante, una cafetería y una peluquería infantil) y un servicio de ludoteca para que los padres puedan dejar a los niños en el recinto con todas las garantías. «Cuando abrimos el segundo negocio en Marineda City intentamos renovar el concepto de entender los cumpleaños, en el que compartir unas instalaciones mucho más grandes y con actividades más novedosas, con múltiples variantes como los cumples de mañana, mediodía o incluso las party night para niños de 9 a 13 años, con ocio adaptado a las diferentes edades», señala Sandra Armas.
Gestionar este local -en el que trabajan 30 profesionales- no es tarea sencilla, pero la idea era ofrecer otra alternativa a los niños que habían celebrado desde pequeños sus cumpleaños en el negocio original.
Hace dos años, y después de visitar centros por todo el mundo, decidieron abrir su tercera empresa, el primer parque de trampolines de Galicia y el segundo de España. Megajump es un parque de camas elásticas en el que se pueden desarrollar diferentes actividades. Desde jugar al baloncesto saltando, hacer acrobacias y tirarse sobre una piscina de cubos de espuma hasta jugar un partido de dodgeball, un deporte que en otros países está federado y se parece al brilé tradicional.
«Vimos este tipo de parques en otras ciudades y creímos desde un principio que iba a ser un éxito en Galicia. La verdad es que en casi dos años de actividad podemos decir que la aceptación ha sido buenísima», precisan. Con Megajump nació el grupo de empresas Laboratorio del Ocio -que factura 1,2 millones anuales?, cuyo nombre es toda una declaración de intenciones. Un verdadero laboratorio en el que la creatividad manda y que, entre las tres firmas, emplea a 80 profesionales. «Si algo nos diferencia de otras empresas del sector es nuestro gran equipo humano; invertimos en formación constantemente, lo que nos ha llevado a crear una escuela propia de formación que se ocupa de que todo nuestro equipo esté formado en las últimas tendencias del mercado y de transmitirles los valores de la empresa», añade Sandra.
Ella y Ana no dejan de viajar y estar presentes en las mejores ferias del sector de todo el mundo. Y de diversificarse. Como acredita la apertura en su momento de la primera heladería de yogur de Galicia, a la que seguiría tiempo después otra franquicia. En total, cinco empresas distintas capitaneadas por dos mujeres incansables que siguen pensando en nuevas ideas.
Su aventura empresarial, en todo caso, es una historia «muy normal». Durante su etapa universitaria, Sandra y Ana comenzaron a colaborar los fines de semana con una empresa de animación de la provincia de Lugo en la que descubrieron un sector hasta entonces desconocido y con grandes oportunidades. La tendencia de celebrar los cumples de los niños fuera de los hogares empezaba a calar entre los consumidores y decidieron emprender. Lo que no sabían es que aquel era el comienzo de una incipiente carrera empresarial. «Así montamos nuestro primer negocio. Un local de barrio con varias salas en las que a día de hoy todavía se celebran cumpleaños», recuerdan.
Con el paso de los años, Fantasía empezó a combinar las fiestas en el local con la externalización de servicios, que ofrecen en domicilios, colegios, asociaciones o grandes corporaciones. Durante la crisis, le pusieron proa al mal tiempo y reforzaron su idea: más inversión y mejores servicios. La apuesta, dos decenios después, ha sido un éxito. La aventura continúa.
Sandra Armas y Ana Chas empezaron a trabajar en el mundo del ocio durante su etapa universitaria. | eduardo pérez
El parque de los deportistas
Profesores de educación física, clubes e incluso deportistas de élite han pasado por las instalaciones de Megajump (situadas en el centro comercial Comcor de A Coruña) para complementar sus entrenamientos. Cuando Ana Chas y Sandra Armas decidieron montar este nuevo modelo de negocio, leyeron mucho sobre el salto, que según varias investigaciones de universidades estadounidenses, bien ejecutado, desarrolla muchos músculos del cuerpo además de ser un buen método antiestrés. «Nos contaron unos clientes que Bill Gates tiene en su casa una habitación con colchonetas elásticas para saltar y desestresarse», apunta Sandra. Lo cierto es que Megajump atrae a colectivos de diversos puntos de Galicia, e incluso a empresas de todo tipo que van a hacer dinámicas especiales con sus empleados.
La celebración de cumpleaños focaliza en pura lógica una buena parte de la facturación de la empresa. Las fundadoras de Laboratorio del Ocio identificaron el público objetivo potencial y abrieron el parque con la idea de cubrir una nueva franja de edad: las celebraciones de los adolescentes. «Megajump viene a completar nuestra propuesta de ocio y fiestas en la ciudad para niños de todas las edades», destaca Sandra. Porque sí, son muchos los adultos que se han sumado a la moda de saltar. Que además, concluyen, «te hace ser más feliz».