«El tren es un aliado eficaz para el traslado de residuos a Sogama»«Ahorramos al erario público dos millones de euros al año, con mayor carga de trabajo»

Abelardo Carrillo Jiménez (Villares del Saz-Cuenca, 1956) es director general de Renfe Mercancías desde octubre del 2016, pero lleva en la empresa desde hace 32 años. Esta compañía, junto con las firmas Copasa y Logirail, bajo el nombre de la UTE Ecocargo, es la concesionaria, desde marzo del pasado año, de la recogida y transporte por carretera y ferrocarril de las 800.000 toneladas de residuos sólidos urbanos que generan casi 2,3 millones de gallegos procedentes de 294 concellos, basura que es tratada por Sogama en sus instalaciones de Cerceda

-¿Qué papel juega el ferrocarril dentro de este plan de recogida y transporte?

-El tren es un medio de transporte que aporta sostenibilidad, sobre todo medioambiental, y también eficiencia económica. Dentro del plan de transporte de residuos de Galicia lo que estamos demostrando desde que llevamos la concesión es que los resultados son espectacularmente buenos.

-¿En qué parámetros se basa la empresa para justificar estos resultados?

-Se ha producido una mejora de la eficiencia y la eficacia. Estamos respondiendo al gran reto que representaba la operación logística de organizar la carga en los trenes, el transporte y la descarga. De ahí que me parezca que el tren está demostrando ser un aliado muy eficaz en el tratamiento de los residuos sólidos en Galicia.

-¿Qué balance hace de esta concesión, que entró en vigor en marzo del 2016?

-Lo que pone de manifiesto este proyecto es la capacidad de organización de las partes que intervienen, que son las Administraciones, la autonómica y la local, y las empresas, tanto operadoras como proveedoras de servicios. Sin pretender desatar la euforia, me parece que se trata de un éxito espectacular. Es la primera vez que hemos demostrado que el transporte intermodal, la combinación de carretera y tren junto con el resto de la logística empleada, en Galicia es capaz de hacer frente a un problema de viabilidad de las ciudades.

-¿Dónde radicaba el problema?

-En el tratamiento de recogida de los residuos, y que Galicia lo ha resuelto, desde mi punto de vista, de manera ejemplar. Es un modelo de éxito que debe ser imitado por otras comunidades autónomas por su elevada efectividad.

-¿En qué se basa este modelo?

-Se combina todo lo que es la recogida de los residuos, el traslado a los 42 puntos de concentración, el transporte, bien por carretera, bien por ferrocarril, la coordinación con el medio ferroviario, la eficacia del propio transporte ferroviario, y, posteriormente y el tratamiento en Sogama. Para mí es un ejemplo de muchas cosas: de organización territorial, logística, un acierto de coordinación de modos, ejemplar y modélica, un modo de participación de las Administraciones y la mixta público-privada. Creemos que el cliente, en este caso la Xunta, está satisfecha por el trabajo que se está llevando a cabo.

-Sobre todo si se tiene en cuenta el elevado grado de dispersión poblacional y una orografía y una climatología algo complicadas.

-Cuando se empezó con esta concesión, el predominio de la carretera era total, o casi total. Representaba el 80 % de la recogida de residuos de Galicia. En apenas un año y tres meses hemos logrado equilibrar la cuota: estamos prácticamente en el 50 %, lo cual constituye un aliciente para pensar que el tren tiene una aportación más significativa y perdurable porque sirve de solución a este problema de dispersión poblacional. Creemos que debemos aumentar todavía más este protagonismo del ferrocarril, pero sin dejar de lado la carretera. Al contrario, el transporte viario, con esta estructura poblacional que tiene Galicia, es muy importante en esta logística y nunca prescindiremos de este medio.

-¿Es más barato llevar la basura en tren hasta Sogama?

- El coste se ha reducido en torno al 30 % con respecto al anterior modelo. Es un dato muy significativo que avala nuestro trabajo.

-¿Este modelo de gestión de los residuos hacia dónde avanza, pensando en los ocho años que restan de concesión?

-El objetivo es mejorar la capacidad ferroviaria y logística. Es decir, que nuestro volumen de transporte vaya aumentado en función de las necesidades de los ciudadanos. Y eso se traduce en las inversiones que hemos realizado en Cerceda, la compra de 126 contenedores nuevos, hemos hecho un túnel de lavado de contenedores, mejoramos las cuestiones relacionadas con la higiene y la salud ambiental. Hemos invertido, y esto es muy novedoso e importante, en un sistema informativo específico para la gestión de toda la logística y los elementos que intervienen en esta concesión, como convoyes y camiones. Estas actuaciones nos están dando una capacidad de conocimiento muy exportable del modelo desarrollado en Galicia. Se mejoró la estación de Taboadela, se ha invertido en un sistema de pesajes... Nuestra idea es que el modelo crezca. Estamos al 50 % de la participación modal y podemos crecer hasta el 80 en breve, porque para eso hemos diseñado este plan de inversiones.

«Logramos reducir en un 30 % los costes de traslado de los residuos a Sogama siendo mucho más eficaces»

El director general de Renfe Mercancías avala el trabajo desempeñado por la compañía en estos casi 16 meses de concesión.

-¿Toda esta inversión está cuantificada?

-Hablamos de unos 15 millones de euros y eso que todavía queda margen de mejora, al tratarse de un modelo de éxito, gracias a la aportación de Logirail y Copasa.

-¿Qué empleo genera Renfe Mercancías en el transporte de basura a Sogama?

-Son 35 empleos directos y otros 80 indirectos, solo con la vertiente ferroviaria. Pero son muchos más los que generamos dada la logística que precisamos. Hablamos de seguros, reparaciones, contrataciones de obras y servicios...

-¿Qué le diría a los gallegos sobre el modelo de gestión empleado por la concesionaria?

--Para mí lo más importante es el orgullo de llevar a cabo este proyecto. No solo se trata de una empresa que busca los fines económicos. Lo que estamos haciendo es dar una solución a una obligación social, a una necesidad de organización del territorio, a una exigencia ambiental y a una reclamación de la organización de las ciudades y de los núcleos de población del rural. Creo que está siendo un modelo de transporte eficaz. Hemos reducido el coste del traslado de residuos al contribuyente. Pasamos de suponer un coste al erario público de 14 millones de euros al año, a 12 millones, y con un mayor volumen de carga de trabajo. Hemos ahorrado dos millones de euros al año, pero además hemos ahorrado emisiones contaminantes a la atmósfera, reordenando el tráfico rodado en carretera, es decir, ya no hay tantos camiones en circulación. Es como para sentirse muy orgulloso. Y repito, este modelo es extrapolable a otras comunidades autónomas con unas características sociales y de territorio similares.

-El presidente de Sogama, Javier Domínguez Lino, tiene claro que las 800.000 toneladas de basura al año se convertirán pronto en un millón. ¿Tienen previsto este nuevo escenario?

--Sí, lo estamos planteando. Tenemos un parque de contenedores y vagones listo para ampliar, estamos mejorando las condiciones de tracción de las locomotoras y todo lo que tiene que ver con los recursos de producción. No va a haber problema alguno con eso nuevo escenario que se nos plantea.

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