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Portos negocia la pesca recreativa en determinadas dársenas gallegas

Antonio Longueira Vidal
T. Longueira CARBALLO / LA VOZ

SOMOS MAR

Negocia con los colectivos afectados las condiciones de una apertura que no alcanzaría a sus 112 instalaciones portuarias

24 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Representantes de Portos de Galicia y responsables de diferentes entidades de pesca recreativa de Galicia, que aglutinan los intereses de 75.000 federados de toda Galicia, se reunieron el mes pasado en Santiago con el objetivo de alcanzar un acuerdo sobre la legalización y la regulación de una practica muy arraigada y extendida en las 122 dársenas de competencia de la Xunta, pero que está prohibida: la pesca recreativa. En aquel encuentro, las partes implicadas acordaron diseñar un mapa y unas condiciones para el desarrollo de estas actividades de ocio en las instalaciones portuarias. También quedó claro por parte de Portos que será muy difícil que se permitan lanzar las cañas en grandes terminales comerciales con gran actividad profesional, como sucede, por ejemplo, en Brens (Cee).

Documento de trabajo

En aquella reunión de diciembre, el departamento que preside Susana Lenguas se comprometió a tramitar y entregar a las diferentes asociaciones y federaciones gallegas un documento en el que se fijará, entre otras cuestiones, en qué dársenas se podrá disfrutar de la pesca del calamar de potera y en cuáles no. En el organismo autonómico volvieron a recalcar esta semana que será inviable que la totalidad de los muelles de su titularidad puedan acoger en un futuro más o menos próximo a los pescadores deportivos, aunque también dijeron que todavía no hay un listado definitivo: «Estamos ultimando la propuesta para presentar a las federaciones en las próximas semanas, tal y como se acordó en la última reunión», indicaron en el departamento dependiente de la Consellería do Mar.

Otros dos aspectos que incluirá con toda seguridad el futuro reglamento será el de los horarios y el de los espacios específicos habilitados para que la faceta recreativa no colisione con la que desarrollan los pescadores, armadores y mariscadores profesionales. También parece seguro que los que deseen disfrutar de su afición tendrán que suscribir una póliza de responsabilidad civil (accidentes), cuyo coste ronda entre los 15 y 20 euros al año.

Por su parte, Fernando Piñeiro Oubiña, secretario de la Asociación Galega de Pesca Recreativa, calificó de «razonables» las propuestas de Portos: «Se trata de volver a los muelles, de hacerlo de forma legal y segura y de disfrutar de nuestra afición por la pesca sin estorbar a los que tienen que trabajar». Y añadió: «Con buena voluntad llegaremos a un acuerdo satisfactorio». José Antonio Beiro, presidente de la Federación Galega de Pesca Marítima Responsable, dijo: «La gente está preocupada y nerviosa por la falta de noticias, pero de lo que se trata es de regular la pesca recreativa en las instalaciones portuarias, porque la realidad es que a día de hoy no está permitida».

Por su parte, Manuel Mouzo, presidente de la Federación Galega de Pesca y Cásting, solo se limitó a decir que avalaría «lo que diga Portos».