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Escoltan hasta Langosteira un barco lleno de cacao con una vía de agua

emiliano mouzo A CORUÑA / LA VOZ

SOMOS MAR

Marcos Míguez

El mercante avisó a Salvamento Marítimo al detectar problemas cuando navegaba junto a las islas Sisargas

08 dic 2020 . Actualizado a las 09:23 h.

Para cacao, el que pudo haberse montado el domingo pasado frente a las Sisargas. Un buque cargado con 8.600 toneladas de grano de ese producto que es la base del chocolate se vio en apuros cuando navegaba a unas 30 millas de las islas. Salvamento Marítimo recibió el aviso de que el mercante tenía problemas sobre las tres y media de la tarde del domingo. Fue el momento en el que el capitán del carguero, el Zealand Delilah, con una tripulación de quince personas a bordo, alertó al servicio de rescate de que había sufrido una vía de agua en su ruta hacia Ámsterdam.

La embarcación, con bandera de los Países Bajos, contactó con Salvamento para solicitar refugio en un puerto de abrigo, pero comunicó que podía navegar por sus propios medios. Capitanía Marítima autorizó al barco a poner rumbo al puerto de Langosteira y, aunque no solicitaba asistencia, desde el centro de Salvamento Fisterra se movilizó al buque Sar Gavia. A la vez que este remolcador salía al encuentro del mercante averiado, también puso proa hacia el lugar el Don Inda, ambos con la misión de escoltar al barco cargado de cacao, puesto que, a pesar de la vía de agua «incontrolada» -como tuiteó Salvamento-, le funcionaba la máquina y podía navegar por sus propios medios.

También se desplazó hasta el punto en el que el barco se vio en apuros el helicóptero Helimer 201, con la tarea de comprobar que no existía contaminación marina a raíz del percance.

Ya casi había oscurecido cuando el Zealand Delilah, escoltado por las embarcaciones de Salvamento, inició su ruta hacia el puerto exterior de A Coruña. La maniobra de aproximación y de entrada a Langosteira estuvo asesorada por un práctico del puerto.

Consiguió llegar, pero con serias dificultades. Cuando entró en la dársena estaba ya «muy emproado»; es decir, con la proa muy introducida en el mar debido a que el agua inundó algunos compartimentos situados en esta parte delantera del barco. Y tanto: cuando entró en el puerto, el calado era de apenas 7,8 metros.

Sometido a inspección

El Zealand Delilah quedó atracado y amarrado alrededor de las 23 horas del domingo. Se trata de un buque mercante de 134 metros de eslora y 20 de manga que fue botado en el 2011. Navegaba desde Las Palmas con destino al puerto de Ámsterdam con 8.600 toneladas de grano de cacao a bordo.

Al buque se le está haciendo una inspección a la que obliga el Memorandum de París a aquellos buques extranjeros que utilizan puertos españoles y que fue exigida por Capitanía Marítima. En ella se detectó que una línea contraincendios tenía una fuga que filtraba el agua del mar al interior del barco.

El mercante estaba realizando los trámites oportunos para poder zarpar ayer mismo.

El barco estuvo atracado en el mimo muelle en el que todavía está el Sukran C, el mercante que estuvo varios días a la deriva frente a Galicia tras sufrir un incendio.