Londres ofrece a la flota de la UE seguir faenando en sus aguas por tres años
SOMOS MAR
Los británicos quieren reducir de forma progresiva el número de embarcaciones y el volumen de capturas
30 sep 2020 . Actualizado a las 19:15 h.El Reino Unido ha movido ficha. Tras meses negándose a ceder ni un ápice en materia pesquera, hoy Londres ofreció a la Unión Europea (UE) abrir sus aguas a los pescadores comunitarios para que sigan faenando en sus caladeros durante tres años más, en un intento por desbloquear las negociaciones para el futuro acuerdo comercial.
Los británicos han definido su oferta como un «proceso de transición» con el objetivo de ayudar a las comunidades costeras comunitarias a adaptarse a los cambios que implicará su salida del bloque. Por ello, en la propuesta se contempla que entre el 2021 y el 2024 el número de embarcaciones provenientes de los Veintisiete, así como las toneladas de capturas realizadas por ellas, se vayan reduciendo de forma progresiva.
La Comisión Europea rechaza valorar la propuesta de momento, quiere estudiar los detalles. «Las conversaciones están en marcha esta semana», aseguran sus portavoces.
El Gobierno británico desea reemplazar la Política Comunitaria de Pesca (PCP), por un sistema de cuotas, algo que en Bruselas considera inviable por su extrema complejidad. Tendrían que negociar año a año. El anuncio de la oferta británica no ha sentado bien entre los pescadores locales. «No podemos aceptar la entrega o cesión de sus nuestros derechos marítimos para conseguir un acuerdo comercial», afirmó a la prensa londinense Barrie Deas, presidente de la Federación Nacional de Organizaciones de Pescadores.
Acuerdo con Noruega
La oferta coincide con el anuncio del acuerdo pesquero suscrito entre el Reino Unido y Noruega. El Tratado es el primero de su tipo que el Gobierno británico alcanza con un país europeo, de manera independiente de la UE, en más de cuatro décadas. Todavía se desconocen los detalles y el impacto que pudiera tener para la flota comunitaria ya que la UE negocia año a año con el país nórdico la gestión conjunta de stocks como la caballa. El gobierno noruego, eso sí, ha garantizado un acceso mutuo e intercambio de cuotas con los británicos en aguas del Mar del Norte, muy rentables para una parte de su flota, que podría estar tentada a comerciar con esos derechos.