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La ciencia ayuda a mejorar la selectividad de la pesca de arrastre

La Voz REDACCIÓN/ LA VOZ

SOMOS MAR

Investigadores del Instituto Español de Oceanografía (IEO) de Vigo, a bordo del buque Miguel de Oliver, en la campaña Descarsel 2019, sobre la selectividad del arrastre
Investigadores del Instituto Español de Oceanografía (IEO) de Vigo, a bordo del buque Miguel de Oliver, en la campaña Descarsel 2019, sobre la selectividad del arrastre IEO VIGO

Investigadores del IEO de Vigo zarpan en el Miguel de Oliver en otra campaña Descarsel

28 ago 2020 . Actualizado a las 16:55 h.

«Investigadores y pescadores por la reducción de los descartes y la pesca sostenible». Con ese objetivo, el de conciliar el interés socioeconómico de quienes viven del mar con la protección de los recursos, arranca este sábado desde Vigo una nueva campaña Descarsel. Continuando las de años anteriores, la ciencia sale en auxilio de la flota ayudando a mejorar la selectividad de las redes de arrastre de fondo. Desde este 29 de agosto al 9 de septiembre, a bordo del buque oceanográfico Miguel de Oliver, catorce científicos estudiarán en caladeros del Cantábrico-Noroeste cómo reducir los descartes en esa pesquería. 

Trabajarán en el litoral, en la plataforma de Galicia oeste y del Cantábrico occidental, el año pasado hasta una profundidad de 500 metros. Todo para mejorar la selectividad con idea de que las redes atrapen fundamentalmente las especies objetivo, analizando también la supervivencia de algunas que llegan a bordo con vida. El investigador Julio Valeiras, jefe de la campaña, pone ejemplos: «Rayas y cigalas vivas pueden ser liberadas cuando no haya cuota o sean individuos pequeños. Para ello se mantienen en viveros a bordo, se monitorizan y se liberan marcadas al mar». En ediciones anteriores de Descarsel han comprobado que «un alto porcentaje de las rayas pueden sobrevivir si son manipuladas de forma adecuada», explica. Así los arrastreros pueden acogerse a las exenciones a la obligación de desembarque de todas las capturas, con los consiguientes beneficios para el ecosistema, la especie y el propio pescador, «porque puede devolver vivas al mar algunas especies sin consumir cuota, lo que contribuye a realizar buenas prácticas pesqueras», añade Valeiras

Desde el IEO de Vigo apuntan que durante los próximos días, a bordo del Miguel de Oliver valorarán, de forma experimental, las características selectivas de distintos copos de pesca con diferentes tamaños de malla y armados con dispositivos selectivos como ventanas de escape de juveniles. Valiéndose de varias cámaras submarinas instaladas en diferentes puntos de la red y de la avanzada tecnología del buque oceanográfico, monitorizarán totalmente las operaciones de pesca. Así sabrán cómo responden los dispositivos selectivos, cómo se comportan los peces dentro del copo y cómo se mueven para intentar escapar. De ese modo se sientan las bases para «diseñar artes más sostenibles y efectivas, con el objetivo de minimizar los efectos de la pesca en el ecosistema y los stocks».

Un vídeo describe los objetivos de Descarsel, una campaña organizada por el Centro Oceanográfico de Vigo del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y cofinanciada por la Secretaría General de Pesca (SGP) del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP). En el audiovisual, el IEO de Vigo relata que buscan estrategias para reducir los descartes pesqueros mediantes estudios de selectividad por especies y tamaños para evitar la captura no deseada. También analizan la supervivencia de especies no objetivo, a las que siguen marcándolas y devolviéndolas al mar. Además de desarrollar tecnologías de identificación en tiempo real, detectan áreas del caladero con alto riesgo de descartes, una «gestión pesquera activa». En las redes más selectivas que prueban estudian el comportamiento de los peces, su vitalidad y sus reacciones para liberarse, al mismo tiempo que analizan cómo proporcionarles vías de escape a las capturas no deseadas.

Desde el IEO de Vigo afirman que los resultados de la campaña «servirán para la toma de decisiones en materia de gestión pesquera que permitan conjugar la sostenibilidad de los recursos y la supervivencia socioeconómico del sector pesquero». En la del 2019, el Ministerio de Pesca comentaba que las investigaciones se emplearían «para defender de la mejor manera posible la toma de decisiones» sobre la pesca de arrastre ante el Comité Científico, Técnico y Económico de la Unión Europea y ante la Comisión Europea. 

Las campañas Descarsel se remontan a años atrás, desde el 2017 en el Miguel de Oliver pero antes también en pesqueros como los arrastreros burelenses Plaia de Rueta y Nuevo Bitácora. 

Todos los investigadores que participan deben atenerse a las recomendaciones sobre medidas de prevención frente al covid-19 en campañas oceanográficas en los buques de la Comisión de Coordinación y Seguimiento de las Actividades de los Buques Oceanográficos y, para embarcar, han de acreditar un resultado negativo en una prueba PCR.