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El empresario gallego Alfonso Caneiro negocia con los bancos un futuro para Thenaisie Provoté

Serxio González Souto
Serxio González VILAGARCÍA / LA VOZ

SOMOS MAR

MONICA IRAGO

Calcula que podría levantar el concurso de la consevera en cuestión de semanas

27 jun 2020 . Actualizado a las 23:35 h.

Ayer, por primera vez, el empresario gallego que puja por la conservera Thenaisie Provoté habló sobre su proyecto. Lo hizo para confirmar varios de los puntos que a lo largo de los últimos días adelantaron tanto la CIG como Comisiones Obreras, los dos sindicatos presentes en el comité de empresa de la compañía. Es más, según Alfonso Caneiro, fueron las centrales las que llamaron a su puerta para sondear la posibilidad de que adquiriese una firma privada de liquidez e inmersa en un proceso concursal tras fallar los planes del grupo rumano Scandia Food, que se hizo con su control en el 2018. El industrial vigués ya había estudiado a fondo su situación por aquel entonces. Y, aunque las cosas han empeorado, «es posible alcanzar un acuerdo rápido con los acreedores para volver a la normalidad operativa», afirma Caneiro, que se ve en condiciones de levantar el concurso y devolver la actividad a las plantas de O Grove y Mos en cuestión de «dos o tres semanas». Siempre, claro está, que sus actuales propietarios se avengan a vender.

La oferta incluye la adquisición de la participación de Scandia, una ampliación de capital por un importe que se aproximaría a los dos millones y la renegociación de los 5,2 millones que Thenaisie debe a un conjunto de ocho entidades, además de los dos millones que sus proveedores aún no han podido cobrar. Ayer mismo, el empresario se reunió con varios de los bancos que concentran la mayor parte de esa deuda. Su resultado: «Podemos decir que estaríamos en condiciones de sacar a la compañía de la situación concursal, devolviéndola a la normalidad mediante un acuerdo anticipado con proveedores y bancos».

Contrapropuesta inasumible

El problema estriba en que Caneiro ha retirado su oferta ante el rechazo cosechado por parte de los representantes de Scandia en Galicia, cuya contrapropuesta, lamenta el industrial, es inasumible. El empresario está dispuesto, no obstante, a volver a la mesa de negociación si el comité de empresa logra desbloquear la situación y el grupo rumano considera una venta realista. «Entendemos su situación, pero lo que estamos haciendo es tenderles la mano, buscar una solución y mantener el empleo y el tejido industrial en la zona, sin que la conservera se vea abocada a la liquidación». Esta es una de las claves. Entre O Grove y Mos prestan sus servicios 125 personas, cuya influencia en Arousa, por lo que respecta al empleo indirecto, se extiende fácilmente a otro centenar de trabajadores, según los cálculos de los sindicatos.

De la mano de Caneiro, Thenaisie se integraría en un grupo que posee su propia flota y proveería a la conservera de sardina y sardinilla, que concentran el 80 % de su producción, además de proyectarla hacia el mercado gourmet. Tanto el juez que tutela el concurso como los administradores designados ven factible una operación así en estos momentos. De hecho, con la normativa covid en la mano, Scandia ni siquiera tendría por qué haber solicitado su inmersión en un proceso de este tipo. Pero el tiempo apremia, y los sindicatos consideran indispensable que la Xunta, que hasta ahora no ha hablado, haga valer ya sus bazas.