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La UE acuerda incluir el marisqueo a pie en el fondo de ayudas a la pesca

La Voz REDACCIÓN

SOMOS MAR

MONICA IRAGO

Permite utilizar el 10 % del presupuesto destinado a controlar la flota y recopilar datos para mitigar el impacto del coronavirus

15 abr 2020 . Actualizado a las 23:27 h.

El Consejo de la UE acordó el martes incluir a las mariscadoras de a pie como uno de los colectivos que se pueden beneficiar de las ayudas por cese de actividad incluidas en el fondo de ayudas específico que la Comisión Europea ha propuesto para el sector. La decisión contrasta con la postura defendida por el comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, que en su comparecencia de la semana pasada en la Eurocámara derivó a los recolectores al plan Sure —la línea general de ayudas pensada para los trabajadores por cuenta propia—, y a otros canales porque, dijo, no son víctimas «de un distanciamiento social obligatorio de seguridad y no cuentan con grandes costes de infraestructura».

No es eso lo que opinan los Estados miembros, que, junto con los diputados de la Comisión de Pesca de la Eurocámara, han dado entrada a serie de enmiendas a la propuesta de Bruselas entre las cuales figura, precisamente la, inclusión de las mariscadoras de a pie como posibles beneficiarias de las ayudas del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) por cese de actividad. Una corrección que en el caso del Parlamento Europeo va más allá y se extiende al resto de la cadena mar-industria, que podrá ver compensadas las pérdidas por la caída de las ventas de productos. Porque, según informaron los diputados del PPE Gabriel Mato y Francisco Millán Mon, la Comisión de Pesca y el Consejo aceptaron las enmiendas presentadas por el primero para que la respuesta al coronavirus no se limite solo «a la pesca y la acuicultura, sino que se extienda también al marisqueo a pie y al sector procesador».

Millán Mon ha defendido que «era de justicia que los profesionales del marisqueo, un sector fundamental para Galicia, pudiesen beneficiarse de fondos europeos para compensar el cese de la actividad debido a la crisis del coronavirus». También la representante del BNG en Bruselas, Ana Miranda, cree que el pleno debe apoyar mañana que «as axudas podan chegar directamente ao sector e non sexan perdidas coma nestes anos». Porque, recordó, «xa no período 2012-2013, cando se produciu a anterior reforma do FEMP, o BNG solicitou que o marisqueo fose unha das actividades subvencionables por estes fondos europeos».

Dinero de control de la flota para el coronavirus

Otra de las enmiendas que se aprobaron en el Consejo modifica la cerrazón de Bruselas a desviar a mitigar las consecuencias del coronavirus ni un solo euro de la parte del FEMP dedicada a financiar las actuaciones de control de la flota y las actividades pesqueras y recopilación de datos. Los representantes de la UE acordaron dar mayor flexibilidad al instrumento al permitir el uso del 10 % de esos fondos presupuestarios para atender las urgencias del sector

También derribaron la resistencia del Ejecutivo comunitario a cubrir el lucro cesante de las empresas de pesca y acuicultura y acordaron aumentar el volumen de producto que puede recibir ayudas de almacenamiento al 25 % de la producción anual.

El Gobierno central se abre a analizar si puede excluir la actividad de entre las esenciales

Si lo hizo, aunque de forma parcial, con las gasolineras, ¿por qué no con el marisqueo, si al fin y al cabo almejas, berberechos o percebes no son producto de primera necesidad e indispensables en una dieta equilibrada? Los conselleiros de Sanidade y Mar, Jesús Vázquez Almuíña y Rosa Quintana, han vuelto a la carga para tratar de que el Gobierno retire al marisqueo de entre las actividades consideradas esenciales durante el estado de alarma, un paso que daría más facilidades al colectivo profesional para obtener compensación por la paralización. Y lo han hecho porque el Ejecutivo central se ha abierto a analizar si puede ser excluida. En San Caetano se ha recibido un requerimiento de Sanidad reclamando un informe que detalle los impedimentos de los mariscadores para desarrollar la actividad con garantías y analizar la posibilidad de retirarlo de entre las actividades esenciales.

Así es cómo Vázquez y Quintana firman una nota argumentada en la que detallan la imposibilidad de guardar la distancia recomendada tanto a bordo del barco como en las playas y puntos de control, que los equipos de protección pierden efectividad en el medio acuático, pues las mascarillas se mojan, las pantallas de protección se caen y no dejan respirar a quien está agachada... Todo un riesgo asumido para, por encima, no tener a quién vender, puesto que su principal cliente, la restauración, está cerrada por el imperativo legal y, de hecho, desde que se declaró el estado de alarma sus ingresos han caído en más de un 96 %.