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La plantilla de Isidro 1952 desconoce si la firma ha pedido concurso de acreedores

La Voz REDACCIÓN

SOMOS MAR

PACO RODRÍGUEZ

El domingo acabó el plazo de un mes hábil tras tres meses en situación de preconcurso

14 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

En medio de la huelga indefinida que mantiene la plantilla de Isidro 1952 (sucesora de Isidro de la Cal) para manifestar su rechazo a un ERE que consideran fraudulento, ayer los operarios trabajaron con normalidad en la planta de elaboración de sushi que la empresa tiene en el polígono Espírito Santo de Cambre. Con normalidad, pero intrigados sobre la situación de la empresa, dado que, aunque supuestamente era el primer día hábil tras el plazo que da la ley para presentar la solicitud de concurso si no se ha podido salir de la insolvencia tras el período de preconcurso. Y esta medida se demandó el 12 de septiembre.

Los representantes de los trabajadores desconocían ayer si la dirección de la compañía había realizado los trámites correspondientes en el juzgado y desde la empresa tampoco quisieron decir nada al respecto. La persona que estos días había estado haciendo las veces de portavoz aseguró desconocer si se había entrado o no en concurso y en el registro público correspondiente, ayer no aparecía el nombre de la compañía.

Reuniones con Xunta y empresa

Los representantes de los 223 trabajadores que forman la plantilla de Isidro 1952 volverán a reunirse con las autoridades autonómicas en San Caetano para explicar la situación y reclamar ese apoyo jurídico que ofrecieron desde la Consellería de Economía.

Además, para el lunes próximo está fijada una reunión con la empresa, en teoría para negociar ese ERE que afecta a 136 de sus 223 trabajadores, un proceso mediante el que la compañía pretende modificar las condiciones salariales -hablan de reducciones de sueldo que en algunos casos alcanzan 300 euros- y laborales.

Carlos Villar, delegado de Industria de CC. OO., señaló que, aunque fuertemente endeudada, la empresa es viable. A decir de los trabajadores ha sido la mala gestión la que ha puesto la compañía contra las cuerdas.