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España y Japón se alían para quitar mala fama a la pesca de tiburón

e. a. VIGO / LA VOZ

SOMOS MAR

04 dic 2018 . Actualizado a las 07:51 h.

Los armadores españoles -básicamente gallegos- y los japoneses están hartos de tener que pagar los platos que rompen las flotas ilegales asiáticas, que hacen finning en la pesca de tiburón, es decir, cortar la aleta del escualo y devolver el cuerpo mutilado al mar. Mientras esas embarcaciones siguen operando con impunidad, las flotas que desarrollan una actividad sostenible, regulada y vigilada sufren los ataques de los conservacionistas, que alientan boicots que complican la actividad de los empresarios. Es el caso de la negativa de muchas navieras a transportar aletas de tiburón, independientemente de la procedencia del producto.

«España y Japón compartimos una visión de la pesquería del tiburón y creemos que podemos unir fuerzas para defender su actividad y uso sostenible y responsable», dijo ayer Javier Garat, secretario general de la patronal Cepesca, en la gira que una delegación del sector pesquero nipón realizó a la Cooperativa de Armadores de Vigo (Arvi). Así que están dispuestos a ir de la mano para atajar la desinformación en torno a esta pesquería.

Tanto España como Japón disponen de dos de las flotas más estrictas en cuanto a cumplimiento informativo preciso de sus capturas «y están sujetas a una legislación y control exhaustivos», recordó Garat. Es más, en octubre se puso en marcha FIP Blues, el primer Proyecto de Mejora de Pesquería (FIP) para pez espada y tiburón a escala mundial, que durante la reunión se presentó a la delegación japonesa. Impulsado por las organizaciones de productores gallegas de palangre de superficie y por empresas procesadoras y comercializadoras, en FIP Blues participan unos 160 barcos de pesca, que suponen el 95 % de los palangreros comunitarios en los océanos Atlántico, Índico y Pacífico y representan el 90 % de las capturas de estas especies de la flota europea, así como a 13 empresas de transformación.

Durante el encuentro, organizado por Cepesca, en colaboración con Anapa, Arpoan y OPP Lugo, ambas partes presentaron sus cifras de capturas. Japón pesca una media de 30.000 toneladas de tiburones, especialmente de tintorera y marrajo dientuso, frente a las 54.000 toneladas de España. Las empresas de ambos países hacen un uso completo y efectivo de los tiburones, utilizando la carne, la piel, los huesos, los cartílagos, el hígado, el corazón y las aletas.